Regresa el tema de la Mina San Martin de Sombrerete en este nuestro Zacatecas, para recordarnos lo mal que andan las cosas con este gobierno que no atina a cambiar para bien el entorno que nos rodea.
Hace apenas un par de semanas, Alejandro Tello Gobernador constitucional de nuestro Estado dio claramente un espaldarazo al Sr. German Larrea, dueño del grupo México al enviar las fuerzas públicas con las policías estatales y el ejército para recuperar la mina que hasta la fecha tiene ya 11 años en huelga, y unos días más tarde al anunciar en los medios de comunicación “la buena nueva” indicando que la reapertura significaría para nuestro estado más de 4 mil empleos y claro un bienestar económico sin precedentes.
Es claro que el gobernador se manifestaba en forma totalmente parcial – y mentirosa – a favor de la empresa minera y en contra de los mineros que hace ya más de una década a través de su sindicato se proclamaron el huelga por la falta de seguridad y muchas otras cosas que no es el momento de explicar.
La realidad es que la propia compañía nunca hablo de 4 mil empleos sino a lo mucho 650 donde 600 serían los mineros pesimamente mal pagados que obviamente serian de la comunidad y 50 puestos directivos que vendrían de otros lados. De donde saco Tello la cifra de 4000 o más – valla usted a saber – lo que es claro es que se puso del lado de la compañía minera como lo ha hecho en el pasado sin importarle mucho el desastre ecológico que esta producirá a la ecología de nuestro estado ¿A cambio de que?de empleos pesimamente mal remuneradosporque fuera de ello nada deja la minería y menos con un gobernante de rodillas ante sus intereses.
Pero vallamos por partes, y aquí bien vale la pena recordarle al lector de que es de lo que estamos hablando, ya hemos comentado en colaboraciones previas que la industria minera tanto nacional como del extranjero tiene concesionado más del 25 por ciento – es decir una cuarta parte – del territorio nacional, a precios ridículos de hasta 5 pesos por hectárea, a empresas Canadienses que salen de su país – donde existen grandes recursos mineros – porqueallá no los dejan devastar la ecología como aquí si lo hacen a cambio de las mochadas a los políticos que a cambio les dejan hacer, y claro también a nuestros empresarios a los que poco les interesa el bienestar de su país y si el de sus propios bolsillos, encabezados por Carlos Slim y German Larrea entre otros.
Nunca debemos olvidar el incidente de Pasta de Conchos donde murieron más de medio centenar de mineros a los que en tiempos de Vicente Fox no se hiso nada para intentar al menos su rescate como si se hiso por ejemplo en Chile en una historia por todos conocida. El responsable por las pésimas condiciones de seguridad en esa mina en particular, German Larrea no se dignó tan siquiera a asomarse al lugar del incidente que fue manejado por autoridades como el Encargado de la Secretaria del Trabajo quienes lejos de defender el interés de los caídos y o sus familiares estuvieron listos a retirar la responsabilidad que les era propia por la mala supervisión de la mina y sus precarias condiciones de seguridad lo que fue ampliamente difundido por el Obispo de Coahuila Raúl Vera.
Como todos recordaremos la empresa del magnate de los caballos de pura sangre que mientras ocurría la tragedia él se daba el lujo de divertirse en el hipódromo de la ciudad de México y que ni siquiera quiso invertir en la recuperación de los cuerpos de sus trabajadores – al fin de cuentas estaban ya bien enterrados – y quien después regateo los apoyos a los familiares de los difuntos que aceptaron sus limosnas porque muchos de ellos en una actitud de dignidad prefirió no hacerlo.
Ahora bien, el señor es dueño de muchas minas más, de las que sobresalen por estar en huelga desde hace 11 años, la de Cananea, la de Taxco y la de San Martin en Sombrerete, y no podemos olvidarnos que en tierras de Sonora también fue apoyado por las fuerzas del Estado Mexicano para acabar ilegalmente con la huelga y recuperar la mina, de la misma forma que lo hicieron aquí en Zacatecas con el respaldo del gobernador quien de esta forma se convirtió en alguien parcial sin analizar a fondo el asunto legal que aún estaba por resolverse.
Para nadie es un secreto que el Sr. Larrea se pasa las reglas, las leyes y las autoridades por debajo del arco del triunfo, y le vale depredar el medio ambiente como recientemente sucedió en Sonora en otro de sus complejos mineros en donde hubo un derrame accidental que perjudico gran parte de los recursos hídricos de aquel estado y por el que tendría mínimamente que habérsele retirado la concesión, pero como el maneja a través de sus amigos y compadres al Estado Mexicano se salvó prometiendo que construiría mas de 30 plantas tratadoras de las aguas contaminadas y dos años después solo ha construido 3 y ninguna de ellas ha entrado en funciones.
Y si el gobierno respalda a este tipo de nefastos personajes son tiempos que la sociedad oponga resistencia por que se puede, en Baja California Sur en la serranía que se encuentra entre La Paz y Los Cabos de donde proviene el 90% del agua que se consume en los centros urbanos y en las pocas zonas de riego de esta hermosa parte del país; se pretende iniciar la explotación de oro en una mina a cielo abierto que acabaría con la ecología del lugar, pero por fortuna una sociedad más combativa que la nuestra ha iniciado una lucha legal que está deteniendo este criminal proyecto.
Otro ejemplo es el de la huasteca en donde las comunidades indígenas se han opuesto con todo a la extracción a través del FRAKING del gas y el petróleo de esa zona porque saben que esto utilizaría cantidades exorbitantes del agua y la contaminación de ello perjudicaría a sus comunidades y por ello están a pie de guerra en contra de algo que niega PEMEX pero que es a todas luces verdad.
La pregunta es hasta cuando nuestra sociedad hará algo, porque si nuestros gobernantes claramente se ponen del lado de los depredadores, es momento que nosotros actuemos y nos opongamos a este tipo de acciones que por unas cuantas monedas – unos empleos mal pagados – dejan un daño irreversible al medio ambiente. ■
Seguiremos comentando al respecto.
