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jueves, 18 abril, 2024
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La austeridad republicana

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Por: RICARDO ARTEAGA ANAYA •

El discurso de quienes fundaron morena versó desde el inicio en el combate a la corrupción, a eliminar las grandes bolsas de recurso destinado a los beneficios de toda la clase política, desde los bonos de los regidores hasta los miles de millones de pesos destinados para la comodidad, alimentación y seguridad del presidente de la república, criticados por aquellos que señalaban que con ello no se acabaría la corrupción, no desistieron de su postura, se logró hacer público el derroche excesivo en dichos beneficios y la ciudadanía se convenció de que no se puede continuar manteniendo a una clase política en la comodidad y en los lujos cuando el pueblo vive en la pobreza y en la miseria.

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Convencido que de no lograr la mayoría en ambas cámaras, López Obrador, dedicó los últimos días de campaña para invitar a los ciudadanos a votar 5 de 5, es decir, brindar su apoyo desde el presidente municipal hasta el presidente de la república, fue así que personajes lograron una victoria contundente sin lograr entender el motivo de la misma. En ambas cámaras se obtuvo dicha mayoría, muchos señalaron que seríamos sometidos por el poder absoluto que sostiene el presidente electo sobre las mismas, la realidad es otra, tanta pluralidad de ideas ha generado fuerte debate hasta entre la misma militancia de morena; desde el primer día los senadores de morena y sus diversos líderes al interior de las bancadas señalaron los excesivos bonos que percibirían por el simple hecho de haber iniciado su encargo, algo así como un bono de bienvenida, casi cuatrocientos mil pesos para cada uno.

Días después habían acordado eliminar por completo el servicio de edecanes, alimentos y botanas, de igual forma la eliminación del seguro de gastos médicos mayores y la venta de una flotilla de vehículos que son puestos a disposición de los legisladores para su uso personal; hasta ese momento la población aplaudía dichos acuerdos, sin embargo, quienes ya habían sido participes de anteriores encargos tanto en el senado como en el congreso, por lo tanto partícipes de todos estos lujos, decidieron que regresaría el servicio de edecanes y de botanas después de trece horas de sesión, les costaba bastante esfuerzo tener que subir escalones para servirse su propio café, o pagar sus alimentos de su bolsillo.

Es así que se abre la puerta a la posibilidad para que el plan de austeridad republicana tan prometido sea puesto en duda, sin embargo, esta tarea no es solamente un esfuerzo que deben realizar nuestros legisladores federales, diariamente son destinados miles de millones de pesos en todas las dependencias para que nuestros funcionarios trabajen en la comodidad y en la opacidad, los legisladores locales deben adecuar su presupuesto bajo este principio de austeridad, para que así la población pueda exigir y presionar a los demás representantes; como ya hemos descrito en colaboraciones anteriores, Zacatecas fue pionero lograr una reforma constitucional para que los miembros de nuestro congreso local no puedan ejercer ninguno de estos beneficios; la propuesta para que suceda lo mismo con los ayuntamientos se encuentra en la congeladora por diversas cuestiones, sin embargo, debe volverse una realidad, nuestro estado ya inició con la austeridad prometida, debemos concluirla exigiendo al ejecutivo que con el ejemplo logre presionar a los demás, la eliminación de bonos para funcionarios de gobierno deberá convertirse en una realidad.

El presidente electo, desde hace años, mencionó que predicaría con el ejemplo, tal vez sabía que al llegar al encargo, muchos legisladores y representantes de morena se negarían a dejar tan jugosos bonos y beneficios y por ende evitarían a toda costa no perderlos por completo, la cuestión es que no es algo que deba ser meramente legal, moralmente se encontrarán obligados a dejarlos cuando el presidente de la república rinda protesta y comience a cortarlos de raíz. Las promesas de campaña deben dejar de ser solamente promesas, deben convertirse en una realidad, quienes deseen continuar siendo parte de una clase política ambiciosa y vulgar se encontrarán con el señalamiento y el rechazo de los ciudadanos.

La austeridad Republicana dejará de ser una simple propuesta, los ciudadanos decidimos por un proyecto de nación, estoy convencido que tarde o temprano que quienes manejan dobles discursos serán públicamente señalados y perderán la poca credibilidad que les queda.

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