■ Hace recomendaciones para evitar reciban alguna multa
Mediante sistemas informáticos y bases de datos, las autoridades gubernamentales conocen los movimientos financieros de todos los ciudadanos y, si las erogaciones no corresponden a los ingresos, tienen la facultad de investigar la procedencia de los recursos. En caso de no comprobarse, el contribuyente es sujeto de una multa equivalente al 25 por ciento del monto no demostrado.
Así lo advirtió Luís Alfonso Santos Rayas, coordinador del doctorado en Impuestos de la Unidad Académica de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), quien dio a conocer la presentación del libro “La discrepancia fiscal en las personas físicas”, en el que hace recomendaciones de planeación para evitar que las personas físicas sean objeto de alguna multa.
Comentó que en 2014 hubo una reforma importante al artículo 91 del Impuesto Sobre la Renta y de esa manera se determina la diferencia entre las erogaciones que tiene una persona física y los ingresos que declara.
“La discrepancia fiscal se mide en el transcurso de un año. En ese periodo las máquinas envían una auditoría electrónica y la autoridad le puede decir a una persona física que todos los sistemas y bancos le han informado todos sus movimientos en tarjetas de débito y crédito, y de todos los viajes nacionales o al extranjero, y si el monto erogado es mayor al ingreso que declara, se genera esa discrepancia”, explicó.
Santos Rayas expuso que en el momento en que se determina que una persona física cuenta con una discrepancia fiscal, ésta solamente tiene un plazo de 20 días para demostrar el origen o de lo contrario se le cobra un impuesto del 35 por ciento de la cantidad que no pudo demostrar.
El objetivo del libro, entonces, es desarrollar y explicar todo el procedimiento de discrepancia fiscal, y que la persona física conozca las medidas administrativas que debe hacer para no incurrir por desconocimiento o ignorancia en un problema de discrepancia fiscal.
Sugirió a los contribuyentes ser más ordenados, cambiar sus hábitos y tener siempre todos los papeles y documentos a la mano, especialmente los estados de cuenta, ya que las autoridades se dan cuenta de todos sus movimientos: “hoy en día los sistemas de la autoridad tienen toda la información de cuentas, compra de seguros, bienes que se compran, viajes al extranjero, entre otras cosas”.
Santos Rayas indicó que las autoridades cuentan con información más completa respecto a los movimientos financieros de las personas físicas que los propios contribuyentes, debido a que estos piensan que son operaciones propias e íntimas y piensa que no tiene una represión fiscal.
La presentación del libro “La discrepancia fiscal en las personas físicas” se realizará el próximo martes a las 17 horas en el Teatro Fernando Calderón, con la presencia del secretario de Finanzas, Jorge Miranda.
