8.8 C
Zacatecas
jueves, 28 marzo, 2024
spot_img

El Huayrapamushka nació en medio de un contexto social conflictivo en AL

Más Leídas

- Publicidad -

Por: ALMA RÍOS •

■ La agrupación celebrará con un concierto, el sábado 23 de junio, su 43 aniversario

- Publicidad -

■ El programa conjunta una serie de sones zacatecanos y de otras regiones del país

 

El Huayrapamushka nació en medio de un contexto social conflictivo en América Latina, región en la que en los años 70 se instauraron dictaduras militares en países del sur como Argentina, Chile y Uruguay.
Era también relativamente reciente y de gran influencia el surgimiento del primer país socialista, Cuba, que vino a convertirse en un hito en su historia. Y no estaba lejano el Movimiento Estudiantil de 1968 en México que devino en una masacre de jóvenes y una posterior persecución de otros en la llamada Guerra sucia.
En aquellos años, unos jóvenes zacatecanos tuvieron su primer contacto con una “música extraña” que luego ha trascendido etiquetada en general como “música latinoamericana”; composiciones tradicionales ejecutadas con charango, bombo legüero, quenas, zampoñas, el cuatro venezolano, el tiple y la guitarra, pero también en el caso de México, de su música campesina; surgieron asimismo, piezas de nuevo cuño que relataban la lucha por la liberación de los pueblos latinoamericanos o por la aspiración a ella, y que llegó a la entidad como ola, mediante una embajadora europea, Marie Annick Morisse.
¿Cómo es que dio la vuelta desde el cono sur hasta Europa para llegar a Zacatecas? La respuesta está justo en la diáspora migratoria que provocaron las dictaduras militares de las que miles de jóvenes salieron huyendo, algunos de ellos músicos que, mediante el lenguaje que conocían encontraron también una herramienta para dar divulgar la problemática existente en sus países y en general en América Latina.
“Un hecho social y cultural fundamental fue el derrocamiento del gobierno de Salvador Allende que se dio en 1973”.
Recuerda todo esto Esaúl Arteaga Domínguez, y añade que en medio de aquella “masacre terrible, de desaparecidos, torturas y asesinatos masivos”, una de las víctimas fue Víctor Jara, “un emblema de la canción latinoamericana”.
“De esa manera se empieza a difundir en Europa –esta música-; entonces a México llega de regreso, y en Zacatecas curiosamente nos vino a enseñar los primeros ritmos latinoamericanos una europea”.
El Huayrapamushka (Hijos del viento) celebrará con un concierto, este próximo sábado 23 de junio, su 43 aniversario a las 19 horas en el Teatro Fernando Calderón.
El programa conjunta en su primera parte una serie de sones zacatecanos y de otras regiones del país, que el grupo rescató en sus inicios de entre sus viajes por el estado, y que empezó a difundir en sus programas dentro como fuera de la entidad.
Se complementará con piezas de “esa música extraña” que han sido emblemáticas del género y también del repertorio del grupo universitario; con ellas por cierto, también hizo acompañamiento a los movimientos sociales campesinos y urbanos en aquellos convulsos años 70 en la entidad.
En entrevista con tres de sus integrantes actuales, y en el contexto de otro momento convulso del mundo que han acusado investigadores de las ciencias sociales, refleja el más violento episodio de acumulación del capital, devenido en crisis económicas y financieras recurrentes, desplazamientos de personas, olas de refugiados, y una Latinoamérica asediada por los interés de grandes consorcios que buscan hacerse con los recursos naturales de su territorio, se les pregunta acerca de la vigencia de los mensajes de “la música latinoamericana”.
Aquellas canciones hablaban del reparto de tierras, recordaban las épocas de los hacendados y la gana de justicia de los peones, ensalzaban a quienes el pueblo ha señalado como sus líderes morales o criticaban la disparidad entre las necesidades de los obreros y los dueños de las fábricas, señalaban como enemigo al imperialismo norteamericano y conminaban a la lucha armada en aras de la liberación de los pueblos de Latinoamérica.
En comparación, el momento actual arroja centros de detención de migrantes indocumentados centroamericanos y mexicanos, donde se separa a los niños de sus padres, bombardeos en Siria por la disputa de sus hidrocarburos justificada en una lucha antiterrorista, surgimiento de movimientos de autodefensa en México, territorios que se declaran autónomos en el país buscando deshacerse del embate del crimen organizado y aun de la corrupción de las autoridades, a la par de expresarse grandes fenómenos de violencia como feminicidios, desapariciones y desapariciones forzadas, como es el caso del país.
“Yo pienso que parte fundamental del Huayrapamushka sí es denunciar las injusticias y sobre todo, abrir panoramas para concientizar un poco a la gente. También es parte de lo que hacemos. Creo que mientras haya injusticias en el mundo este tipo de canciones podría decir, incluso, que lamentablemente siguen teniendo una vigencia muy importante (…) creemos que todavía es necesaria la canción, y vital saber lo que nos está ocurriendo; simplemente subrayarlo de una manera artística”, dijo Adrián Villagómez Meraz, primera voz y guitarra del grupo.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -