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martes, 23 abril, 2024
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El capitalismo de escasez es un fenómeno global que se apropia de manera excluyente

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Por: ALEJANDRO ORTEGA NERI •

Se padece de una “crisis de escasez” de los recursos humanos debido a un consumo brutal

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El cambio climático también es un fenómeno ocasionado por los humanos: Armando Bartra

El capital de la abundancia, el que era solamente negocio y que no se ensuciaba los pies por el riesgo de perder dinero, ha dejado de existir para dar paso a un “capital rentista” que basa su negocio en la escasez, consideró el sociólogo mexicano Armando Bartra en su visita a Zacatecas para participar en el 6 Congreso Latinoamericano de Ciencias Sociales.

¿Por qué esta territorialización? Se preguntó el catedrático. ¿Por qué de pronto el capital volvió a la querencia, a poner los pies sobre la tierra, los ríos, las presas, el agua, los bosques, el mar? Bartra aseveró que se padece de una “crisis de escasez”, en la que los recursos humanos necesarios para la vida se están escaseando debido a un consumo brutal de la modernidad.

“Tenemos un problema con la tierra fértil, tenemos un problema serio con el agua potable, tenemos un problema con la conservación de los bosques y la capa que protege los suelos”, sentenció el académico. El problema de la fertilidad de los suelos es muy grave en Zacatecas, dijo, el cambio climático también es un fenómeno generalizado que es ocasionado por los humanos y la lógica del mercado, que provoca que haya actividades en las que la escasez se vuelve el mejor negocio posible.

El capitalismo de escasez, explicó Bartra, es un fenómeno global que se apropia de manera excluyente y monopolista de recursos escasos. Como lo hacen Alberto Bailleres, Germán Larrea y ahora Carlos Slim. Esto es grave, advirtió el investigador, porque mientras más escaso es algo, mayor es su precio. Es la renta. Es un capitalismo rentista que no apuesta por la abundancia sino por la escasez, que no conserva el recurso sino que lo depreda. Es un capitalismo suicida, sentenció, que conduce al barranco.

En este modelo, la voracidad está conduciendo a destruir los recursos de manera progresiva porque en dicha destrucción está su ganancia, la cual es mayor cuanto mayor sea la depredación. “No es una persona, pero si lo fuera, es un psicópata, un sociópata, por cuanto que su negocio radica en la destrucción”, enfatizó.

“Yo no creo que Slim quiera que se acabe el mundo pero sus ganancias van a provenir hasta el punto en que eso que está invirtiendo se vuelva un recurso escaso y se eleven sus precios”, dijo Bartra. El capitalismo rentista es algo contra lo que hay que resistir, porque no es el gobierno, no es la época, es el modelo de producción que pasó de la abundancia a los tiempos de la escasez. “Está escarbando el fondo de la olla y se vuelve más rapaz, más violento”, explicó.

“Quienes estamos en el mundo en donde hay algo que saquear, estamos siendo la última línea de defensa frente al capital. La otra dimensión. La defensa de los territorios”. En Zacatecas si hay algo, ejemplificó, son pueblos que están defendiéndose, y lo que llama la atención apuntó el sociólogo, es que no ceden. Hay una resistencia en los territorios a las ofensivas de este capital rentista.

Sin embargo, esta defensa de los territorios se carcome y se debilita cuando no se le apuesta por vivir ahí. “Me parece admirable la gente que defiende el pueblo en el que no quiere vivir, del que se quieren ir, del que están hasta la madre y sin embargo, si hay una ofensiva la defienden”, manifestó el catedrático.

Bartra reconoció que hay un vaciamiento de los estadios, se desfonda la posibilidad de vivir en el campo y llegan las trasnacionales y hay que defender, advirtió. Pero para quedarse, dijo, la gente necesita una forma digna de vivir, de tener voluntad para recuperar el campo y de hacer de él un lugar que dote de sentido a los jóvenes.

El reto mayor, consideró, es que se defienden mundos que están en proceso de deterioro y desgaste, y cuando la ofensiva grande venga se descubrirá que ya desde antes se había perdido la batalla. “Y quizá estamos a tiempo de ganarla enfrentando un problema serio. Necesitamos recuperar esas formas de vida que nos dan identidad, sentido, y que son un poquito más amables. Tenemos que hacerlo con proyectos en donde haya un recambio generacional”, explicó, pues a su consideración, puede que se derrote la ofensiva de una trasnacional, pero se gana una batalla y la gente se va.

“¿Cómo le decimos a los zacatecanos que hay que defenderse de las mineras si los zacatecanos están tratando de huir de aquí?” Finalizó.

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