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jueves, 28 marzo, 2024
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Fresnillo maltrecho (en seguridad) y gobierno sin modelo

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Por: La Jornada •

¿Por qué Fresnillo es un municipio tan explosivo? Es el municipio más grande en población del estado, ya rebasó los 200 mil habitantes que se reparten en un territorio con amplia presencia rural y una muy dinámica vida urbana. La pirámide demográfica indica un pujante grupo juvenil. La posición geográfica de este municipio le permite conectar las zonas estratégicas de la región centro-norte con la centro-occidente del país. Demasiados caminos alternos lo que hace imposible su vigilancia simultánea. Por todas estas características los grupos delincuenciales eligieron a Fresnillo como centro de operación regional. No es gratuito que mandos altos de los Zetas hayan vivido en este lugar. Además, es una zona urbana con presencia de pandillas juveniles que ahora son controladas y jineteadas por los Cárteles. Lo cual da a estas agrupaciones control de los territorios. ¿En qué consiste este ese control? Pues les proporciona inteligencia, saben quién entra o sale de las colonias y tienen el dominio de la distribución de enervantes, pero también de asaltos a casa-habitación, cobro de piso y hasta de venta de objetos robados. Ejercen una especie de gobierno delictivo en todo el municipio.
Así las cosas, la pregunta es, ¿la estrategia del Gobierno del Estado es buena opción para enfrentar esta estructura delincuencial? Pues NO. Si los malos tienen el gobierno criminal es porque controlan los territorios, y con ello la vida cotidiana sobre ellos: reclutan a sus jóvenes, fiscalizan todas las actividades ilícitas. Son como una organización panóptica. Las coordinaciones policiales son externas a los territorios y no ejercen ningún dominio sobre ellos. La socialidad son las redes de comunicación social con diversos medios de comunicación: el dinero es el medio de la comunicación económica, y el poder en los ayuntamientos es el medio comunicativo de la política local. Pues bien, los delincuentes ejercen formas de dominio sobre esos medios de construcción de la socialidad. Es decir: están dentro. Y las autoridades estatales están fuera del lugar donde se gesta el control social. Los delincuentes, por ello, tienen mucho poder: biopoder. Se han metido en los sistemas de expectativas de las nuevas generaciones: más biopoder. Por ello, afirmar que las estrategias de prevención no tienen que ver con el crimen organizado es expresión de supina ignorancia. ¿Los cuerpos de coordinación policial y de reacción inmediata son alternativa ante este escenario? ¡En lo absoluto! Es como atacar el síntoma y abandonar el lugar donde se re-produce la enfermedad. ¡Y meten a las policías municipales en esa torpe estrategia! Doble error, llueve sobre-mojado.
Se requiere una estrategia donde el Estado recupere el espacio interno de la socialidad. No sólo el espacio público, sino el espacio social mismo. El Estado está no sólo ocupado por poderes fácticos, sino expulsado de la vida social. Debemos recuperar al Estado, en ambos casos. Pero el gobierno actual debería emprender acciones que le permitieran que el Estado se recuperara a sí mismo. Sin embargo, se muestra torpe y lerdo. Y mientras la mancha del mal crece en nuestros pueblos, el gobierno sigue con modelos fracasados y cada vez más contraproducentes. Ojalá y exploren otras opciones para armar sus estrategias. No es gratuito que la aprobación del gobernador Tello haya caído al 22 por ciento. Niveles de popularidad que son factor de (in)gobernabilidad. Fresnillo maltrecho y gobierno sin proyecto.

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