“Enredos” e incapacidad para legislar, otros de los motivos por los que no tenemos agua

Las recientes declaraciones de la candidata a diputada local por la coalición Juntos Haremos Historia, Mónica Borrego Estrada, en un espacio informativo local, han generado polémica pero sobre todo un legítimo cuestionamiento sobre las capacidades para legislar de algunos de los aspirantes a cargos públicos, así como su desconocimiento de temas esenciales para la ciudadanía, como lo es el del agua.
La aspirante a la diputación se “enredó” al responderle a su entrevistador para explicar otro “enredo” previo que tuvo durante una rueda de prensa, en la que se le cuestionó sobre su labor como diputada de la 62 Legislatura a favor del agua. Su respuesta aludió en ese momento a las presuntas acciones del gobernador Alejandro Tello en colusión con Víctor Armas, que podrían derivar en un posible “desfalco”, y lo cual, de acuerdo a nota informativa publicada por La Jornada Zacatecas, también implicaba a la Presa Milpillas. Al ser cuestionada posteriormente en entrevista, Borrego simplemente dijo desconocer el tema.
Más allá de los dimes y diretes que se generan entre gobernantes y candidatos al calor de la presente contienda electoral, lo que realmente preocupa es la falta de trabajo legislativo y propuestas serias de los candidatos a cargos públicos con respecto al tema del agua, lo que se explica ya sea por su indiferencia, o por su profunda ignorancia de una de las necesidades primordiales de la ciudadanía.
La mayor parte de los candidatos de los partidos políticos que asisten actualmente a las colonias para hacerse promoción reciben de la gente el reclamo de contar con agua potable de forma más regular, o al menos no verse tan castigados con los tandeos del vital líquido. El común denominador en las respuestas de dichos candidatos es la simplificación de una situación compleja, así como promesas que no parten de diagnósticos reales de la problemática de la falta de agua en la entidad.
En la actualidad, 114 colonias de Zacatecas están bajo el esquema del tandeo dispuesto por la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ), lo que violenta el Artículo cuarto constitucional, y de acuerdo a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ), no garantiza el derecho humano al agua sugerido por Naciones Unidas y la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Ahora bien, lo que se debe tener presente es que la carencia de agua en Zacatecas no obedece a motivos naturales, sino que en este fenómeno subyacen acciones concretas que viabilizan un despojo sistemático que nuestras autoridades y candidatos no atienden ya sea por ignorantes, o bien por no querer tocar los intereses de los grandes capitales que perpetran dicho despojo.
La Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), por medio de su doctorado en Estudios del Desarrollo, ha hecho hincapié en el hecho de que la extracción minera acapara notablemente el agua potable para sus procesos. Al respecto, la propia Comisión Nacional del Agua (Conagua) admite que hay en territorio estatal 20 mil 312 títulos de concesión, a partir de los cuales se permite extraer mil 601 millones de metros cúbicos por año. En suma, es más el agua que va para los procesos mineros que para las viviendas zacatecanas.
Por si fuera poco, Conagua también admite que 70 por ciento del agua que se reparte en la zona conurbada de Zacatecas presenta altos niveles de contaminación por metales pesados como arsénico y flúor que afectan los dientes, riñones y pueden generar distintos tipos de cáncer.
Otro actor que tiene responsabilidad es Grupo Modelo, que con sus actividades en el municipio de Calera produce diariamente 25 millones de cervezas, para lo cual dispone de una concesión de 13 millones de metros cúbicos de agua de la cuenca Fresnillo-Yesca, de acuerdo con lo denunciado por la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA). Según el organismo, la cervecera tiene derecho a utilizar entre ocho y 10 pozos de agua, pero en realidad accede de forma ilegal a cerca de 330.
Sin referir a los responsables y la problemática arriba referida, la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ) admitió desde 2017 que, de acuerdo a sus estudios, se prevé que Zacatecas y ciudades cercanas sólo tendrán agua durante 10 años más. Es decir, se sentencia a la población sin siquiera darle una explicación de por medio.
Frente a una situación como esta, resulta una falta de seriedad de la coalición Juntos Haremos Historia –en especial de Morena- el postular a personas improvisadas y ajenas a la realidad social. El “llenar” diversos cuadros políticos con personajes de esa índole no es congruente con la credibilidad que Andrés Manuel López ha ganado durante los últimos años, credibilidad que se nutrió en buena parte por el trabajo de académicos y políticos serios, y la cual hoy se ve cuarteada por la postulación de personas que parecen más cercanas al oportunismo político que al trabajo profesional.