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martes, 16 abril, 2024
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La Innovación en una Sociedad del Conocimiento. Preparando talentos para los trabajos del futuro

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Por: MANUEL HARO MÁRQUEZ •

Cada niño comienza su aventura por la vida con un increible potencial, con una mente creativa que enfrenta la vida con curiosidad, preguntas y con un deseo de aprender del mundo a través de juegos; 98% de los niños en preescolar son “Genios Creativos” que pueden pensar en posibilidades ilimitadas para usar un simple clip de papel; en esa misma idea: sabian que 6 simples piezas de Lego se pueden combinar en más de 915 millones de maneras?
La Prueba de “Pensamiento Creativo de Torrance” cita como el pensamiento divergente de los niños disminuye con el paso del tiempo. Resultados de un estudio del Foro Económico Mundial denominado “Reporte de los Trabajos del Futuro” destaca que muchos de los modelos educativos se encuentran desconectados de las habilidades que se necesitan en los mercados profesionales y laborales actualmente.
Dicho estudio cita como las escuelas tienden a enfocarse en desarrollar principalmente habilidades cognitivas con objetivos específicos y tradicionales, en vez de fomentar habilidades como la resolución de problemas mediante la creatividad y la colaboración. Esto debería ser motivo de preocupación al observar las habilidades requeridas en la Cuarta Revolución Industrial: la resolución de problemas complejos, el pensamiento crítico y la creatividad son las tres habilidades más importantes que un niño necesita para prosperar.
Es absolutamente cierto que la base del conocimiento sin duda está en las comunidades académicas teniendo a la educación como principal palanca de desarrollo; hoy en día se habla mucho de la alta capacidad y el talento para el desarrollo de grandes proyectos por parte de jóvenes que demuestran habilidades suficientes para involucrarse en cualquier reto; a pesar de que en muchos casos las instituciones académicas se encuentran desactualizadas en sus programas académicos que incluyan nuevas tecnologías e incluso nulas en cuanto a tecnologías de tendencia.

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Los jóvenes han ido creando una cultura de autoestudio que lo más destacado es que lo hacen en grupos de colaboración con intereses comunes y mejor aún con perfiles muy diversos, consolidando así un modelo de innovación abierta y multidisciplinaria que fortalece el desarrollo de proyectos liderados por equipos muy completos.
Lo anterior es lo destacado y motivante, pero nos reta a rediseñar las estrategias para fortalecer los modelos educativos en donde esa población estudiantil joven encuentre alternativas de desarrollo que les permita ser competitivos en cualquier escenario; si bien existe una gran necesidad de líderes principalmente en áreas tecnológicas tanto en dependencias públicas así como en el sector privado, no hay que perder de vista la necesidad de un nuevo mercado profesional y económico que se base en empresas novedosas en sus modelos de negocios así como en su visión profesional.
Con la intensión de fortalecer los programas académicos formales en instituciones educativas además con un enfoque más técnico y objetivo se han creado novedosas iniciativas como pudiera ser el Programa de Especialización “Teachers at Intel”, diseñado por uno de los corporativos más visionarios en materia de innovación y tecnologías, donde su mismo nombre deja ver el enfoque principal al impulsar la actualización de los maestros y adopción de nuevos conocimientos que permeen de manera natural hacia nuestros jóvenes talentosos para lograr el fortalecimiento de nuevas habilidades.

Ante este escenario resulta necesario pensar en cómo fortalecemos la forma de educar a nuestros jovenes desde edades más tempranas, que podamos hacer resurgir aquel pensamiento creativo que muchas veces van perdiendo ahogados en modelos educativos en ocasiones hasta obsoletos; existe el Modelo Educativo STEM (Science, Technology, Education and Mathematics) un modelo orientado a generar conocimiento de ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas para tratar de entender cómo funciona el mundo y resolver problemas; se destaca principalmente por su adopción para niveles escolares entre 5o de Primaria hasta 1o de Bachillerato.
“Ciencia es más que un tema escolar, o la tabla periódica, o las propiedades de las ondas. Es un acercamiento al mundo, una forma crítica de entender, explorar e interactuar con el mundo, y luego tener la capacidad de cambiar ese mundo… “, Barack Obama.
Aun cuando existen estrategias, tanto públicas como privadas, enfocadas hacia el impulso y fortalecimiento de conocimiento en ciencia, tecnología e innovación; en la mayoría de estas se consideran estudiantes de niveles de educación superior y posgrado, considerando la ventaja de que nuestros jóvenes no pierdan tanto de aquel pensamiento creativo e incluso tengan oportunidad de potencializarlo de mejor manera, debemos involucrarlos a edades más tempranas en niveles entre secundaria y preparatoria.
Finalmente; se consolida de manera global la necesidad de impulsar la creación de comunidades de colaboración multidisciplinarias con un pensamiento creativo más que cognitivo que comiencen a romper viejos estigmas y comiencen a generar sus propios nuevos paradigmas. ■

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