Luego de que miles de estudiantes universitarios, padres de familia, maestros y ciudadanos comunes participaran el pasado lunes en una marcha por la paz, el gobernador Alejandro Tello Cristerna expresó que solo cuando toda la sociedad, la academia y los órganos de gobierno se cohesionen en un mismo objetivo, Zacatecas se blindará contra la inseguridad.
La marcha fue convocada por las autoridades de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) para manifestar su indignación por el asesinato de la joven preparatoriana Cinthia Nayeli Vázquez, crimen que se sumó a otros que igualmente han conmocionado a los zacatecanos.
Posteriormente, el gobernador, acompañado del procurador general de Justicia del Estado, Francisco Murillo Ruiseco, se reunió con representantes universitarios, entre ellos el Rector, Antonio Guzmán Fernández, líderes de maestros y trabajadores universitarios, así como directores de unidades académicas, organizaciones civiles y legisladores, a quienes aseguró que el o los autores del asesinato serán alcanzados por la justicia.
Para lograrlo, pidió a los universitarios reforzar las acciones enmarcadas en un convenio ya existente entre el Gobierno de Zacatecas y el Programa de Estudios e Intervención para el Desarrollo Alternativo (PEIDA), cuyo objetivo es enfrentar diversos problemas sociales como la seguridad ciudadana, entre otros.
“Zacatecas quiere paz”, enfatizó, y pidió a la universidad activar “ejércitos de jóvenes” que luchen por un cambio, porque eso es lo que también quiere el gobierno, y para eso trabajamos, porque la sociedad es nuestro primer aliado, aseveró.
En respuesta, el Rector y directivos de las unidades académicas de la UAZ propusieron que sus especialistas sean incluidos en los programas de prevención y su experiencia sirva para diseñar estrategias de combate a la delincuencia.
A pesar del desaliento por el asesinato de la joven preparatoriana y de otros estudiantes en meses pasados, los universitarios y toda la sociedad zacatecana deben considerar que las propuestas gubernamentales para prevenir y combatir la delincuencia, en adelante reforzadas por docentes e investigadores de la máxima casa de estudios, marchan por el rumbo correcto.
Incorporar a los actores sociales en la búsqueda de soluciones concretas es justamente uno de los principales objetivos del Plan Estatal de Desarrollo, el cual plantea que la seguridad humana es la esencia del Estado y del gobierno.
Bajo este enfoque, la atención a los problemas de seguridad pública exige estrategias integrales y sólidamente estructuradas para superar la fase reactiva de los cuerpos policiales y pasar a la fase de la prevención del delito, en la que se debe profundizar en el estudio en sus causas.
Ante la descomunal fuerza, ímpetu y barbarie del crimen organizado, que ha derivado en la proliferación de delitos de toda índole, desde el robo hasta el secuestro, la extorsión, violaciones sexuales y el asesinato, el combate social debe ser integral y por lo tanto requiere una estrecha coordinación entre las fuerzas de seguridad del estado, la Federación y los municipios, con estrategias que incluyan la profesionalización, equipamiento y uso efectivo de tecnologías que mantengan a salvo la seguridad ciudadana.
En la prevención del delito, otro aspecto de igual importancia es la urgencia de instaurar una cultura de la legalidad que facilite el tránsito del modelo reactivo y punitivo al de aproximación integral de los cuerpos policiales con la sociedad. Este nuevo modelo tendría, además de la vinculación ciudadana, el componente de la protección de los derechos humanos de la víctima y de su familia.
Implica también la generación de dinámicas idóneas para que los integrantes de la comunidad puedan integrarse con un sentimiento de pertenencia, identidad, y algo que es de suma importancia, el mutuo compromiso. Al concretarse, sería un fuerte reconstituyente del tejido social, hoy tan deteriorado y a veces casi inexistente.
Para alcanzar estos objetivos –como ya lo planteó el gobernador Alejandro Tello Cristerna ante los universitarios y está plasmado en el Plan Estatal de Desarrollo 2017-2021—, es preciso crear órganos de vinculación y enlace con organizaciones sociales para consulta, análisis, formulación y articulación de acciones que incidan en el mejoramiento de la seguridad pública, así como en el necesario seguimiento y evaluación de las políticas públicas.
Alejandro Tello y la UAZ han dado otro paso para superar la actual adversidad, pero faltan muchos para que Zacatecas se recomponga. Debemos asumir que es tarea de todos que no haya más casos como el de Cinthia Nayeli.
Sólo cohesionados en objetivos, mística y trabajo, sociedad y gobierno podrán blindarse contra los flagelos que tanto laceran la vida de las
familias.
*Titular de la Coordinación Estatal de Planeación
