■ Los egresados han demostrado su competencia para desempeñarse en el servicio profesional docente, considera director de la Benmac
La Reforma Educativa ha evidenciado que las instituciones formadoras de docentes tienen razón de ser, pues sus egresados han demostrado su competencia para desempeñarse en el servicio profesional docente, afirmó Felipe Ramírez Mendiola, director de la Benemérita Escuela Normal Manuel Ávila Camacho (Benmac).
“Cuando entra la Reforma Educativa se cuestionaba la educación Normal e incluso hubo voces que decían que la tendencia era a desaparecer la formación normalista y agregarla a otras instituciones como sucede en otros países donde la formación de maestros depende de universidades”, recordó.
Sin embargo, el resultado en las evaluaciones que se aplican a los maestros que ingresan al servicio profesional docente, es decir, que obtuvieron plazas en el concurso de oposición, muestran que más de 90 por ciento de ellos son idóneos para estar frente a grupo.
Este año, por ejemplo, el 100 por ciento de los egresados de la Benmac en Educación Especial, Educación Preescolar, Educación Primaria y Educación Secundaria con especialidad en Telesecundaria obtuvieron un resultado idóneo en el proceso de evaluación, según indicó.
Ramírez Mendiola puntualizó que la idoneidad significa que un docente tiene las competencias para desempeñarse profesionalmente frente a grupo en el sistema de educación básica.
Es decir, “si nos vamos a los resultados y hacemos a un lado las especulaciones, los resultados nos indican que el Normalismo tiene una razón de ser y que, efectivamente, son los normalistas los más competentes para ser profesores”, expresó.
Manifestó además que la mayoría de los docentes que obtuvieron una plaza para el actual ciclo escolar es normalista y muy pocos son egresados de otras instituciones de educación superior.
Consideró que ello se debe a que un profesor debe conocer el proceso de planeación en los diferentes contextos donde se encuentran las escuelas, lo que implica una formación teórica y práctica que se adquiere en las aulas de la Normal.
Además, Ramírez Mendiola manifestó que lo docentes deben tener conocimientos psicológicos sobre los niños y los adolescentes, los que se adquieren en la formación Normal pues una de sus líneas atiende el desarrollo del niño y del adolescente desde el primer semestre.
Concluyó entonces que para aplicar la evaluación que se realiza en el Concurso de Oposición se debe tener el conocimiento teórico-pedagógico, práctico y de la especialidad correspondiente.
