Ciudad de México. Las detenciones e internamientos de migrantes indocumentados han ido en aumento en Estados Unidos en semanas recientes como consecuencia de la política racista y xenófoba del presidente estadunidense Donald Trump, que está generando más polarización, advirtió el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.
Aunque todavía no han ocurrido deportaciones masivas, «sí se han incrementado en Estados Unidos las detenciones, y los internamientos (de migrantes en centros de reclusión), por lo que ya pedí medidas cautelares a la Comisión Interamericana» de Derechos Humanos (CIDH), subrayó el ombudsman tras participar en un foro sobre desplazamiento forzado interno.
Una muestra de dicha política xenófoba, dijo González Pérez, es la Ley SB4, que facultaría a cualquier agente policiaco en el estado de Texas a solicitarle sus documentos migratorios a algún detenido, para después expulsarlo en caso de que su situación fuera irregular.
Dicha norma –que entraría en vigor el próximo 1 de septiembre– es la más regresiva y discriminatoria que ha promovido el gobierno de Trump, ya que su vaguedad y ambigüedad puede generar abusos en contra de los migrantes, alertó el presidente de la CNDH, quién ya interpuso una solicitud de medidas cautelares ante la CIDH contra esa ley.
Por otro lado, González Pérez anunció que en las próximas semanas enviará un anteproyecto de ley al Congreso para erradicar el fenómeno del desplazamiento forzado interno, que afecta a miles de personas en diversos estados del país.
