- Esto implicaría una nueva deuda a 25 años; el pago anual sería de 200 millones de pesos
- El proyecto tiene un costo de 5 mil 600 mdp; el estado debe aportar mil 900 millones
La contratación de nueva deuda, a través de un esquema de Asociación Público Privada (APP), será necesario en caso de que fracasen las gestiones para obtener recursos públicos.
El secretario el Agua y Medio Ambiente, Víctor Armas Zagoya, aseguró que para obtener la parte del presupuesto que debe aportar el estado en la construcción del acueducto dentro del proyecto del Sistema Milpillas, existe una primera opción que es la de gestionar el dinero en la Federación.
Si esto no se logra, indicó que la segunda alternativa es pedir financiamiento bajo un esquema APP, que se estima a 25 años con un pago anual de 200 millones de pesos.
El funcionario compareció ante los diputados de la 62 Legislatura local este martes, para abordar los detalles del proyecto de la presa de Milpillas que tiene como objetivo, según expuso, solucionar el problema del desabasto de agua en la zona más poblada del estado durante los próximos 30 años.
La contratación de un nuevo endeudamiento fue uno de los elementos señalados por algunos diputados locales. Por ejemplo, la legisladora por el Trabajo (PT), Geovanna Bañuelos de la Torre, aseguró que pese a la importancia de buscar soluciones al problema del desabasto del agua en la entidad “nos parece muy delicado que la ruta que se explora siempre sea la de la deuda pública”.
Esto lo expuso porque consideró que las dos rutas que expone el gobierno para conseguir su parte de la inversión son la contratación de crédito o la conformación de una asociación público-privada que, “a la larga, es lo mismo”.
Sobre el tema de la deuda también habló el legislador por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Omar Carrera Pérez, quien sostuvo: “que nos quede claro que es un endeudamiento más, cuando se prometió no más deuda en Zacatecas”.
En la exposición inicial y al responder las preguntas de los legisladores, el secretario dividió el proyecto del Sistema Milpillas en dos partes; una, la construcción de la presa y la otra, la del acueducto.
La primera, precisó, la llevará a cabo al 100 por ciento la Federación a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), siendo esta dependencia la que aportará todo el presupuesto que se requiere y, por tanto, también se encargará del proceso licitatorio.
Para esa infraestructura se requieren mil 800 millones de pesos, mientras que para la segunda parte que es la construcción del acueducto se estima un presupuesto de 3 mil 800 millones, lo que sumaría 5 mil 600 millones de pesos para el Sistema de Milpillas en su totalidad. Sería en este segundo monto en el que podría estarse solicitando un nuevo financiamiento.
Al respecto, Armas Zagoya dijo que de los 3 mil 800 millones de pesos del acueducto, 49 por ciento estará a cargo de la Federación a través del Fondo Nacional de Infraestructura. Mientras tanto, el restante 51 por ciento, que representa mil 900 millones de pesos, será el presupuesto que deberá provenir del Gobierno estatal.
Para obtener esta cantidad, el funcionario dijo que es fundamental “acompañar todos al gobierno de Zacatecas” para que puedan tenerse resultado en las gestiones del recurso.
Pero fue en este punto cuando sostuvo que, si se fracasa en estos trabajos, será la 62 Legislatura la que tendrá que decidir si se autoriza un esquema APP para la contratación de nueva deuda o no se da luz verde al financiamiento.
El secretario del Agua y Medio Ambiente estimó que, en caso de que se llegue a esta situación, se tendrán que pagar 200 millones de pesos anuales que, según propuso, pueden obtenerse del Fideicomiso de Impuesto Sobre Nómina ya que con el incremento del gravamen se duplicó su recaudación. Asimismo, precisó que la garantía para el crédito serían los recursos del Ramo 28.
Contrario a lo que ocurrirá con la construcción de la presa, donde será la Federación quien se encargue en su totalidad del proceso de licitación, en la edificación del acueducto será la administración estatal, a través de la Secretaría del Agua y Medio Ambiente que encabeza Armas Zagoya, la que será responsable de la licitación.
En este sentido, el funcionario recalcó por tanto que la iniciativa privada únicamente se encargará de la construcción de esta infraestructura, pero no de su operación, ya que ésta recaerá sobre los organismos operadores de agua que se beneficiarán con las obras y que abarcan los municipios de Fresnillo, Enrique Estrada, Calera, Zacatecas y Guadalupe.
Respecto a los procesos de licitación y, en general, a la transparencia en la realización de este proyecto multimillonario, el diputado por Morena, Luis Medina Lizalde, expuso su desconfianza pues indicó que “las grandes obras en México han sido la médula de la corrupción que nos ahoga”.
Otro de los cuestionamientos, que finalmente no fue respondido por el secretario, fue el realizado por otras legisladoras como Isadora Santivañez y Norma Angélica Castorena, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Guadalupe Flores Escobedo, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Estos comentarios pretendían que se diera información sobre las posibles afectaciones a las comunidades que se encuentran en las colindancias del terreno que ocupará la presa y por donde pasará el acueducto, así como el impacto en el medio ambiente que causarán estos trabajos.
