A bordo del portaviones Ronald Reagan, Japón. Estados Unidos va a replicar a cualquier ataque de Corea del Norte con una respuesta «aplastante y efectiva», prometió este miércoles el vicepresidente estadunidense, Mike Pence, a bordo del portaviones Ronald Reagan, en las costas japonesas.
«Estados Unidos de América siembre buscará la paz pero con el presidente Trump, el escudo está en guardia y la espada está lista», dijo ante 2 mil 500 soldados con uniformes azules y gorras de la Marina en una soleada y ventosa mañana a bordo del portaviones, fondeado en la base naval de Yokosuka, de la bahía de Tokio.
El vicepresidente estadunidense está en la región para reafirmar el apoyo de Estados Unidos a sus aliados, ante las crecientes preocupaciones por el avance del programa de misiles de Pyongyang y su aparente disposición a llevar a cabo otro ensayo nuclear en la búsqueda de un arma que pueda golpear territorio estadounidense.
Pence, que comenzó su viaje en Corea del Sur el día después de que Pyongyang efectuó una prueba de misil fallida, dijo que la amenaza del aislado régimen está creciendo.
En el portaviones, el vicepresidente estadunidense dijo a las tropas que él estaba allí en un momento en que «se vislumbran nubarrones en el horizonte» en el noreste de Asia. «Corea del Norte es la amenaza más peligrosa y urgente para la paz y la seguridad en Asia Pacífico», agregó Pence.
Pero, «vamos a derrotar cualquier ataque y enfrentar cualquier utilización de armas convencionales o nucleares con una respuesta estadounidense aplastante y efectiva», aseguró. Los comentarios de Pence se producen después de que un importante responsable de Corea del Norte expresara que Pyongyang contaba con acelerar el ritmo de sus disparos balísticos.
