■ Herramientas se deben utilizar para analizar la información: ILCE
Aunque la tecnología ha cobrado relevancia en la actualidad, pues a través de ésta se puede acceder a la información, lo importante en el proceso educativo sigue siendo el contenido, opinó René Asomoza, director general del Instituto Latinoamericano de la Comunicación Educativa (ILCE).
“La tecnología siempre ha sido importante pero como un medio que nos permite llegar en contenidos, pero en realidad lo importante es precisamente el contenido. Muchos aparatos nos dan accesibilidad y nos permiten tener información, pero lo importante es qué vemos, cómo lo vemos, cómo lo depuramos y cómo lo discriminamos, porque hay tanta información y la información no es conocimiento”, explicó.
En ese sentido, es necesario buscar la manera de transformar la información en conocimiento, y con base en ello utilizar la tecnología como un instrumento para analizar contenidos.
Señaló que un gran sector del profesorado en educación básica aún se resiste al uso de la tecnología, pero se trata de algo que ocurre en todo el mundo “porque los cambios siempre son diferentes, aunque las nuevas generaciones la están usando de manera cotidiana”.
Asomoza comentó que incluso los niños ya utilizan tecnología de manera cotidiana, por lo que se debe capacitar a quienes generan conocimientos para que a través de ésta puedan transmitir el conocimiento.
Sobre la política educativa en ese sentido, “yo diría que hay planes pero quizá haya que concretarlos más, porque efectivamente, los maestros que no han tenido contacto con la tecnología, se resisten a utilizarlas y entonces hay que capacitarlos, no es tan complicado”.
Informó que en poco tiempo iniciará un plan para escuelas Normales mediante el cual se tomará en cuenta la formación de los estudiantes en el tema de la tecnología, pero “tengo entendido que las políticas actuales abren la posibilidad de que cualquier egresado de escuelas del nivel superior pueden concursar por una plaza y eso abre muchas posibilidades”.
Asimismo, Asomoza manifestó que el uso adecuado y no adecuado de la tecnología en la educación se divide por una línea muy delgada, por lo que es importante promover la capacidad de discernir los buenos contenidos de aquellos que sólo dan información pero no conocimiento.
