Los masones de la Gran Logia del Estado de Zacatecas “Jesús González Ortega” buscarán incidir en el ámbito social. Esta postura se ha convertido en un reclamo desde dentro de la organización, pues “pasan cosas en la sociedad, en nuestra localidad, nuestro estado, y nosotros que alguna vez tuvimos ese poder y esa forma de incidir con nuestra palabra, lo hemos dejado de hacer”, dijo Vicente Sánchez Murillo, quien fue electo el pasado martes 21 de marzo como Muy Respetable Gran Maestro de esta logia compuesta por 29 grupos o logias jurisdiccionales esparcidas en territorio zacatecano, en que se aglutinan unos 600 miembros en total.
La masonería en Zacatecas se remonta a 1826, pero ha estado trabajando de manera interrumpida debido a los movimientos sociales, “aquí han tenido un efecto de que baja la población masónica y se deja de trabajar”.
Su reciente etapa se remite a 1957, por lo que este 2017 se cumplirán 60 años de actividad masónica, precisó Sánchez Murillo. Concretamente La Muy Respetable Gran Logia del Estado de Zacatecas “Jesús González Ortega” se constituyó en noviembre de 1989 y en 1990 se regularizó, por lo que suma ya 27 años de existencia.
“La masonería es un reflejo de la sociedad entera”, dijo, en su seno se reciben personas de cualquier filiación política y religiosa. “Lo que nosotros pretendemos y está establecido desde siempre” es el fomento de valores que guían los actos de los miembros, según explicó, aun en lo que denominan el mundo profano, esto es, fuera del ámbito de la logia.
Observó no obstante en respuesta a si también en ella se verifica como en la vida pública de México una crisis institucional, que algunos masones que se inscriben dentro de la toma de decisiones en la política mexicana, desde su punto de vista, desafortunadamente también han tomado decisiones “que perjudican al país (…) entonces ellos actúan en contra a lo que se les enseña dentro de la institución”.
“La idea es ser mejores hombres, mejores esposos, mejores hijos, mejores hermanos, pero es requisito indispensable conocerse a sí mismo. Por eso es una organización filosófica. Conocerse a sí mismo primero para poder incidir en los demás. Desafortunadamente es una institución donde muchos entran y muy pocos son los que permanecen”, expuso y por tanto, se desapegan de los principios éticos, respecto de lo que solo pueden ser sancionados si permanecen dentro de la organización.
En la dirigencia de la Logia González Ortega han estado durante sus 27 años de existencia nueve personas de diferentes filiaciones políticas, las dos que le preceden, son integrantes del Partido Revolucionario Institucional.
Su caso refiere a un hombre que no tiene filiación partidista y ha estado durante 30 años dentro de la organización, que antes se consideraba secreta y ahora se define como “discreta”.
Históricamente las logias masónicas han incidido en la vida pública del mundo y de México. En respuesta a la intencionalidad de hacerlo en este momento de crisis del país dijo que “desafortunadamente no” está ocurriendo.
Refirió que hace 10 días estuvo en una reunión de Consejo masónico celebrada en el estado de Nuevo León, donde se congregaron los grandes maestros de 31 estados, “y es una queja que se da mucho al interior de la masonería, ahí se desarrollan trabajos y se vierten opiniones pero se quedan entre cuatro paredes, no hay incidencia hacia el mundo profano y es un reclamo que tenemos incluso aquí en Zacatecas de miembros, de que pasan cosas en la sociedad, en la localidad, en nuestro estado, y nosotros que alguna vez tuvimos ese poder y alguna vez tuvimos esa forma de incidir con nuestra palabra ya se ha dejado de hacer”.
Incidir en la vida pública de Zacatecas, dijo si es uno de los objetivos que se ha propuesto su dirigencia, “para que al menos la masonería zacatecana empiece a expresar opiniones acerca de la problemática que nos atañe y nos afecta a todos como sociedad”.
Dijo que al interior de las logias hay periodistas y comunicadores, “pero escriben sus trabajos normales” por lo que ahora se les está invitando a que expresen lo que la masonería pudiera opinar “acerca de la problemática que nos está afectando a todos como la delincuencia organizada, los asaltos, los gasolinazos, impuestos inventados”.
Adelantó entonces, que “sí vamos a opinar ya”. Sin embargo también observó que hay un temor de darse a conocer, pues la masonería ha sido perseguida históricamente.
“Pero yo pienso que poco a poco debemos quitarnos ese temor, y empezar a incidir en la sociedad, y una de las primeras formas va a ser a través de los medios escritos”.
Otra vez sobre el tema de la crisis institucional del país y el reflejo de ésta al interior de las organizaciones masónicas agregó que “sí existe esa posibilidad. Es muy probable. Lo que pasa es que cada Gran maestro tiene su forma muy especial de dirigir y se enfoca en asuntos en los que puede ser competitivo. Y yo haré lo propio. Pero yo sí con la seguridad de no pertenecer a ningún partido político ni de verme afectado por mis opiniones”
Por ello actuará con mayor libertad, asintió. “Sí lo hemos platicado en el cuerpo directivo integrado por 18 miembros y vamos a actuar de esa manera. Va a haber cambios, definitivamente va a haber cambios. Nosotros pretendemos que esto poco a poco se dé a conocer sin que pierda su discrecionalidad. Y crecer nosotros internamente y a lo mejor en vez de criticar las malas acciones que se hacen acá afuera, hacerlo pero abonar con proyectos porque eso es muy dado en nuestra sociedad, criticamos y criticamos pero no opinamos sobre cómo pueden mejorarse las cosas”.
