Esta semana tres políticos volvieron a exhibir el cinismo de la clase política tradicional. El Senador del PAN Javier Lozano, la Diputada Federal por el PRI Susana Corella Platt y el Gobernador Alejandro Tello se llevaron los reflectores cuando dejaron a un lado las máscaras y mostraron su falta de solidaridad con la crisis que vivimos los mexicanos.
El Senador Javier Lozano se opuso radicalmente a la propuesta de austeridad de la Senadora independiente Martha Tagle, quien propone reducir más de mil millones del presupuesto del Senado, eso implica reducir salarios, bonos, viáticos, gastos de representación y publicidad. Por eso el panista se negó rotundamente a respaldar el plan de austeridad de su compañera, en su lugar le preguntó a los periodistas “si me bajan el sueldo ¿Qué sigue? ¿A robar?”
El senador Lozano expreso el sentir de muchos políticos mexicanos que piensan que nosotros tenemos la obligación de mantener sus lujos o excesos y cuando se les niegan esos privilegios, ellos se sienten con todo el derecho de robarnos. Se trata de un grupo de bandidos que no sienten ningún temor por la justicia, ellos saben que pueden robar y sus delitos quedaran impunes.
Casi al mismo tiempo, la diputada del PRI Susana Corella Platt declaraba que a ella no le alcanzaba con los recursos que recibía del congreso, la diputada manifestaba frente a los medios de comunicación que sufría de grandes carencias y privaciones, incluso confesó que su esposo le tenía que ayudar con sus gastos.
La diputada también representa a una clase política que piensa que los ciudadanos somos idiotas, ella intenta que nos compadezcamos de su situación cuando acaba de recibir un bono de fin de año superior al medio millón de pesos. La diputada piensa que con palabras bonitas pueden engañar a una ciudadanía que cada día se informa mejor.
El Gobernador de Zacatecas vive como si nada pasara, a pesar de las manifestaciones y el repudio popular, Alejandro Tello mantiene el aumento en los impuestos y analiza el cierre de los Cobaez sin importarle que dejaría sin empleo a cientos de profesores y que le quitaría una oportunidad de superación a los hijos de nuestros obreros y campesinos. Todo esto, mientras destina más de 114 millones de pesos para promocionar la imagen de su gobierno, lo hace porque sus hijos estudian en escuelas privadas y no sabe la desesperación que sienten los profesores cuando los amenazan con quitarles su empleo. Haga lo que haga Tello siente que su chamba de gobernador está segura.
Se trata de un enfrentamiento abierto entre los ciudadanos y los políticos tradicionales, ellos piensan que nosotros debemos pagar más impuestos para mantener sus privilegios, nosotros pensamos que es hora de acabar con los privilegios de la clase política, exigir resultados y fiscalizar a nuestros gobernantes, ellos piensan que pueden simular austeridad y nosotros estamos decididos a terminar con los abusos, ellos se resisten a vivir como ciudadanos comunes, por eso se reparten millones de pesos en salarios, aguinaldos, seguros de gastos médicos, viáticos y boletos de avión, nosotros sabemos que la única forma de que los políticos se pongan en nuestros zapatos, es que sufran la crisis como la sufrimos nosotros.
Nosotros sabemos que mientras los políticos sigan recibiendo seguros de gastos médicos, nosotros seguiremos padeciendo en hospitales que no tienen médicos ni medicamentos, porque ellos se atienden en hospitales privados con cargo a nuestros impuestos y mientras los políticos sigan recibiendo vales de gasolina, nosotros seguiremos padeciendo el aumento de los combustibles y el robo descarado en las gasolineras, Por eso es tan importante ganar estas batallas, porque necesitamos que los políticos tengan las mismas prioridades que nosotros y eso no ocurrirá mientras ellos vivan alejados de la realidad en un mundo de oropel que se paga con nuestros impuestos.
Necesitamos que los políticos padezcan la violencia para que entiendan que es urgente solucionar la inseguridad, necesitamos que los políticos paguen la reparación de sus vehículos, para que entiendan que urge reparar las carreteras, necesitamos que los políticos se ganen el dinero con el sudor de su frente, para que entiendan el enorme sacrificio que hacemos los ciudadanos para pagar impuestos.
Algunos políticos ya entendieron que las cosas están cambiando, el gobernador de Baja California tuvo que renunciar a un negocio millonario con la privatización del agua, porque miles de ciudadanos salieron a las calles y no se fueron hasta que el gobernador desistió de su fraude y el gobernador de Chihuahua anunció un recorte monumental a la nómina, los viáticos y la publicidad de su gobierno, mientras miles de ciudadanos mantienen tomadas las aduanas y oficinas recaudadoras del estado, pero algunos otros siguen pensando que todo se soluciona anunciando en la prensa que los aumentos son necesarios, pero las cosas están cambiando, ellos dicen que no les alcanza, que tienen que robar o cerrar escuelas, y muchos ciudadanos ya nos cansamos de políticos abusivos e incompetentes. ■
