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jueves, 28 marzo, 2024
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La Blanquita, una comunidad nacida de la impunidad hacia los campesinos

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Por: MARTÍN CATALÁN LERMA • admin-zenda • Admin •

■ Presentan Mariana Terán y Uriel Márquez investigación que relata la historia de este asentamiento

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La Blanquita, comunidad asentada en el municipio de Trancoso, nació como producto de la impunidad luego del asesinato de 18 campesinos en mayo de 1928, crimen que se atribuyó a José León García, hacendado que actuó en defensa de la propiedad privada y en oposición al fraccionamiento de la tierra mandatado por la Revolución Mexicana, revela el libro titulado “Donde sopla el viento, más allá… en La Blanquita”, presentado ayer por Mariana Terán Fuentes y Uriel Márquez Valerio.

“La investigación tiene un tinte entre legal y judicial, pues se inscribe justo en los años en que se empieza a aplicar la legislación agraria nacional y estatal en materia de reparto agrario. En 1917 está la Constitución y de inmediato en Zacatecas se hizo la primera Ley Agraria ese mismo año”, expuso la historiadora.

Entre los campesinos zacatecanos se difundió ampliamente la necesidad de cumplir los derechos adquiridos con la Revolución Mexicana, pero ello generó una reacción también inmediata de los hacendados.

El hacendado de Trancoso en ese momento era José León García, cuyo abuelo había sido Antonio García Salinas, hermano de Francisco García Salinas, gobernador de Zacatecas entre 1829 y 1834, y cuya familia “fue tan poderosa a lo largo del siglo 19 que llegó a colocar a seis gobernadores, cinco en Zacatecas y uno en Aguascalientes”.

El libro aborda, entonces, la imbricación de dos derechos constitucionales, el de la tierra, producto de la Revolución, y el de la propiedad privada que enarbolaba José León García, quien en ese momento poseía 83 mil 570 hectáreas.

Terán Fuentes comentó que José León García perteneció a una red familiar que tuvo alto impacto en la esfera económica, política y social, y por lo tanto reaccionó ante la solicitud de tierra de los campesinos.

“A la primer solicitud, en 1917, no se hizo caso; después hubo una segunda solicitud en 1921 y también se archivó: y en 1927 parte el expediente del que trata nuestro libro. El 26 de septiembre de 1927, la solicitud es presentada ante el Departamento de Agricultura y Fomento y de inmediato le dan trámite, ya que Zacatecas es uno de los siete estados que decidió implementar la política de fraccionamiento de tierras, mientras que el contrato ejidal predominó más en el sur del país”, indicó.

Según se constató en los expedientes judiciales, hubo una gran cantidad de amparos de los hacendados de Zacatecas, al grado que entre 1917 y 1918 se presentaron ante la justicia federal 2 mil 500 solicitudes de amparo de parte de los hacendados.

Para el caso de Zacatecas, entre 1917 y 1930 hubo mil 657 solicitudes de amparo de las cuales 12 son relativas a la materia agraria, es decir, a la petición de los hacendados a la justicia federal de respetar el derecho a la propiedad privada.

Terán Fuentes explicó que en ese momento el gobernador aceleró el proceso para el fraccionamiento y entrega de las tierras, pero los hacendados ya habían generado cierto vínculo con la justicia federal.

En ese sentido, José León García interpuso dos juicios de amparo relativos a La Blanquita. El primero se refiere a que el 18 de mayo de 1928 el gobernador declaró que el propietario estaba en rebeldía porque no había fraccionado la tierra como lo establecía la ley ni había presentado el croquis donde se ubicaban los terrenos exigidos por los campesinos.

“Curiosamente, al día siguiente, en la madrugada, son asesinados 18 de estos 22 campesinos solicitantes de tierra. El proceso pasó a manos de las viudas que a la postre fueron consideradas las fundadoras de la colonia agrícola La Blanquita”.

Sin embargo, el hacendado acudió nuevamente a la justicia federal, y mediante artimañas del juez de distrito Jesús Gudiño Servín, le fue concedido el amparo, mientras que las viudas fueron asesoradas por la Cámara Obrera y el diputado Ramón Saucedo, hasta que presentaron un oficio al presidente de la República exigiendo la tierra y denunciando el asesinato de sus esposos.

Después de una negociación, Terán Fuentes detalló que José León García no tuvo otra opción más que “proponer un acuerdo amistoso” a las viudas en el que accedió a fraccionar su hacienda en mil 64 hectáreas del total de las 3 mil 320 hectáreas solicitadas en 1927. Así se fundó La Blanquita.

Respecto a la autoría del crimen de los 18 campesinos, puntualizó que no existen documentos que señalen a José León García como autor intelectual, pero la prensa agrarista de la época culpabilizó al hacendado, pero también a José Velasco, líder de los Cristeros, como autor material, lo que dio lugar a la interpretación errónea que había un conflicto entre estos y los agraristas.

Señaló entonces que “fue una investigación histórica-judicial, a propósito de la invitación que nos hizo el entonces coordinador jurídico del Gobierno del Estado, Uriel Márquez Cristerna, justo porque encontraron el expediente del caso de La Blanquita”.

“El asunto se prolongó y fue resuelto hasta febrero de 2016 con unos decretos del gobernador Miguel Alonso Reyes, reconociendo que donde está el casco es parte del ejido de Trancoso. Es decir, los apoderados legales, en la segunda mitad del siglo 20, siguieron exigiendo que le indeminizaran 64 hectáreas que seguían en pelea. Desde luego, no hubo tal”.

Según el testimonio de Hermenegildo Raudales, de 94 años de edad, quien describió elocuentemente los hechos ocurridos en 1928, “su comunidad, la colonia avícola La Blanquita, nació bajo la impunidad”.

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