■ Se pretende empoderar a la 62 Legislatura para que adquiera la legitimidad que necesita, dijo
■ La propuesta específica es que desaparezca la figura de herramientas legislativas, aseveró
Luis Medina Lizalde, líder de la fracción parlamentaria del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) al interior de la 62 Legislatura, precisó respecto de su propuesta para suprimir el fondo de Herramientas legislativas, que tiene detrás la convicción de empoderar al Poder Legislativo para que adquiera la legitimidad que necesita, pues dijo, a los diputados “no les corresponde andar repartiendo dinero” y por tanto medrar con las necesidades de la gente para generar clientela política.
“Nosotros estamos convencidos de que no le corresponde al diputado andar repartiendo dinero, entonces nuestra propuesta específica es que esto desaparezca”.
Comentó entonces que uno de los destinos que podría tener en parte la suma de los 200 mil pesos que hasta el momento ha ejercido por mes cada uno de los 30 diputados por este concepto, sería fortalecer auténticamente las Herramientas legislativas, “que consisten en unidades de estudio especializado, en asesorías externas, en investigación de campo, en investigaciones de derecho comparado”.
Todo ello, que auxilia la labor legislativa y el desempeño de los diputados. Por lo que una de las orientaciones de estos recursos podría potenciar al Instituto de Investigaciones Legislativas, “que tiene buenos recursos humanos pero lo percibimos muy abandonado presupuestalmente”.
Precisó otra vez el concepto de gestor que para Morena debe aparejar la labor de los diputados, señalando que su deber es acompañar los esfuerzos de la gente para que no se le excluya de los programas sociales, o en sus peticiones ante la administración pública.
Objetó entonces a las “herramientas legislativas” tal como se han ejercido en el Congreso del estado de Zacatecas, como copia de una modalidad impuesta por Enrique Peña Nieto en el Estado de México durante su mandato, una invención del “estratega de la corrupción número uno”, dijo.
“Repartir dinero no es ser gestor”, observación a la que agregó que a esta práctica se apareja un fenómeno que se presenta con frecuencia, el que haya gente “que vive de eso”.
Respecto de otros posibles destinos de estos recursos, dijo que será motivo de un estudio presupuestal serio que requiere conocer las necesidades de la Legislatura del estado para realizar una propuesta.
“Lo que sí, que no hay ninguna justificación para que se haya introducido este modelo. Ya basta de que el político se ampare en el pobre y sus necesidades para medrar con esa pobreza”.
Dijo que Morena buscará asimismo, entre otras propuestas que van delineando su línea de trabajo, modificar la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Zacatecas para que acabar con el “secretismo”, de manera que se cancelen las sesiones privadas. “Lo público debe ser público. Ese es un principio que debemos mantener”.
Comentó nuevamente de su propuesta para suprimir el fondo de las Herramientas legislativas, que allanará el camino para luego abordar el tema de la reducción de los elevados salarios de los funcionarios públicos de mandos altos, pues los partidarios del Movimiento de Regeneración Nacional ven como una “necesidad luchar por no tener un gobierno rico gobernando a un pueblo pobre”, tal como lo ha expresado su líder nacional Andrés Manuel López Obrador, acotó.
Con el tema, se comprometió públicamente todavía en su carácter de gobernador electo, Alejandro Tello Cristerna, pero no ha habido acciones al respecto.
“El sentimiento social es igualitario y se opone a todo privilegio. Esa es la verdad, y nosotros debemos admitir que la clase política mexicana vive en el privilegio”.
“Pero no vamos a poder hacerlo desde el Poder Legislativo si no tenemos cara para hablar, mientras que no tenga autoridad moral, mientras no tenga la confianza del pueblo, le hace al Ejecutivo lo que le aire a Juárez”.
Sostuvo en esta lógica que al Poder Ejecutivo “le conviene que el Legislativo esté muy desprestigiado, desautorizado; entonces hay que cambiar esas cosas y partir de qué es lo que puede darle autoridad a una posición política: los hechos”.
