■ Los periodistas violentados incluso “son criminalizados”, advierte
“No hay seguridad para nadie. Tu familia sabe que sales a la calle, pero no sabe si vas a regresar”, dice Cristina Velasco Saldaña en entrevista realizada en el contexto de la conmemoración por el Día Internacional de la Libertad de Prensa. Agrega la comunicadora egresada de la Universidad Autónoma de Durango, quien cumple este 2016, 13 años dentro de los medios de comunicación y 10 de ejercer el reporterismo, que las amenazas a través de redes sociales y el asesinato de compañeros, son cosa común, este último, cabe observar, tema que han exhibido sobre la situación del país, organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos y concretamente de la libertad de expresión
Comenta que lejos de garantizarse en México la justicia para los periodistas violentados, incluso, “son criminalizados por las propias autoridades”, quienes en primera instancia hacen señalamientos como, “seguro andaba con un grupo delictivo, quién sabe qué habrá publicado…cubría nota roja”, evitando investigar el tema justo en el contexto de las amenazas a la libertad de prensa.
Entre los eslabones que aún faltan para completar a 100 por ciento esta libertad, Velasco Saldaña, conductora del programa Espacio Abierto del 91.5 de FM, conjuntamente con el periodista Alonso Chávez, refiere precisamente, el resguardo de la integridad física de los reporteros.
El tema conduce a otro que hasta el momento no ha sido suficientemente abordado dentro del mismo gremio, la unión y defensa de los reporteros y periodistas, quienes se exhiben como el eslabón más débil de la cadena que refiere la búsqueda de una libertad de prensa, no sólo en casos de agresión, hoy reiterados en todo el país, y que implicaría la creación de protocolos de seguridad, sino también para asuntos laborales.
“Yo creo que sí nos hace falta unirnos como gremio, defendernos los unos a los otros. Dicen que el reportero defiende a todo mundo con sus notas menos a sí mismo, eso sí es una realidad. Y además esté el hecho de que perro sí come perro”, para el caso de los periodistas, señala.
Es por eso necesaria una visión de cuidado gremial, tanto en el caso de coberturas de manera que haya para ellas un acompañamiento, “que todos sepamos cómo localizar al compañero. No dejarnos solos”.
Cuando infortunadamente ocurre la desaparición o muerte de periodista, “todos nos sumamos en redes sociales, acudimos tal vez a alguna marcha, pero queda en eso. No hemos creado un protocolo real de seguridad para cuidarnos y apoyarnos entre nosotros”, pues observa, hay desunión.
Cristina Velasco Saldaña citó también entre los pendientes para lograr a 100 por ciento una libertad de prensa, la dependencia que tienen los medios de comunicación tienen respecto de los convenios de publicidad gubernamentales.
“Recordemos que por lo menos 50 por ciento de la propaganda o publicidad pertenece al ente gubernamental”, enfatizó.
Enunció asimismo el hecho de que plataformas como la radio y la televisión se encuentran todavía reguladas por criterios como el que desde la Secretaría de Gobernación se expresa en la reciente Ley de Telecomunicaciones, señalando que esta dependencia “puede determinar si un noticiario es imparcial o no”, y por tanto definir el futuro de la concesión del medio que lo produce.
Velasco Saldaña encuentra entre los pendientes para el ejercicio de la libertad de prensa, los temas de transparencia a los que también deben atender los reporteros, por ejemplo, ciñéndose a los criterios de la ley 3 de 3, pero también observa entre las dificultades que día a día enfrentan, la falta de recursos o tiempo para hacer periodismo de investigación, pues en un caso deben de cubrir una cuota de notas, y en el otro, refiere el que “casi todos se mueven bajo sus propios recursos”
Ejercer el periodismo y enfrentarse a la censura, enfrenta primero a los acotamientos que implican los convenios de publicidad y que afectan principalmente a los medios de comunicación más pequeños, pero también, a las agresiones de las fuentes, incluso la propia ciudadanía. Refiere aquí el caso de reporteros amenazados con el linchamiento por una turba que quiso ejercer justicia por propia mano en Puebla y quería evitar ser exhibida.
Agrega como parte de las amenazas a la actividad reporteril, la falta de credibilidad en los medios, “saben que vas de prensa e inmediatamente empiezan a atacarte”.
No obstante el recuento de las dificultades a sortear y las que limitan la libertad de prensa que este 3 de mayo se conmemora internacionalmente a instancias de la Organización de Naciones Unidas, Cristina Velasco propone positivamente las posibilidades que ofrece hoy la Internet.
Ahí dice, “pones tus quejas y frustraciones, porque muchas veces en la nota no se puede por el asunto de objetividad”. En ese espacio es posible manifestarse como el ciudadano o ciudadana que hay dentro de un reportero, ampliando la información sobre un tema, opinando como columnista sobre él, y sobre todo generando un vínculo con la gente para que ésta critique el trabajo del comunicador.
Es un acercamiento con el público que abre una puerta a la libertad de expresión, de manera que “alguien pueda reprocharte y debatirte tu nota. Creo que es un buen ejercicio”.
