10.8 C
Zacatecas
viernes, 29 marzo, 2024
spot_img

La literatura fantástica, una manera más amplia de ver la vida: escritor

Más Leídas

- Publicidad -

Por: ALMA RÍOS •

■ Presenta Gonzalo Lizardo Inmaculada tentación, obra compilatoria de cuentos con simbolismos

- Publicidad -

■ La realidad se entiende en dos variantes: lo que el mundo es y lo que el individuo cree de éste, explica

Eso que se ha denominado literatura fantástica, -una etiqueta con la que Gonzalo Lizardo no concuerda- y a la que propone como nominativo alternativo el de realismo simbólico, “es en realidad una manera más amplia de ver la vida”.

En Inmaculada tentación. Y sus fábulas crónicas, el más reciente libro del fresnillense, presentado la semana pasada en librería André-a, Lizardo explora en 12 cuentos, sendos mundos posibles en los que escribe acerca de la realidad, pero a través de símbolos.

Las historias recuperadas en el volumen editado por Era, nacieron de “bastantes circunstancias” a lo largo de 25 años, pero tienen entre otros elementos comunes, y tal vez el más preponderante, el que se inscriben en “eso que la gente llama fantasía”, dice el autor.

Reiterando su rechazo al  término, afirmó que la función de la literatura no es hablar sobre las cosas que no creemos que existan sino siempre sobre la realidad.

El problema, agrega, es justo la definición de lo que la realidad es, pero Lizardo distingue de en principio dos de sus variantes: la interior y la exterior.

Aquí explica, “una cosa es lo que el mundo es”,  y que advierte, nunca nadie sabrá con certeza, y la otra, “lo que los individuos creen que el mundo es”.

En esta percepción y construcción individual del mundo debe tomarse en cuenta que cada persona tiene una historia, una biografía, que suma una serie de emociones, entre ellas el miedo, “que se manifiestan sobre todo a través de los sueños”.

Los cuentos de Inmaculada tentación son la exploración del antagonismo del mundo interior del individuo, “su mundo privado” y su mundo exterior, una que afirma casi siempre es dolorosa, sobre todo “en el lugar” donde se desarrolla la relación amorosa.

“Un hombre llega con una idea de mujer y la mujer llega con una idea de hombre y resulta que las dos no coinciden, viene el desamor y viene el olvido”.

Este libro, trata así de cómo los sueños, tanto los que elaboramos despiertos como dormidos, “alteran esta visión del mundo y regulan nuestra relación con él”.

Los sueños y los ensueños están presentes también en esta obra, en el método de escritura de los cuentos, pues en su mayoría, recuperan las experiencias oníricas de Lizardo, “que resulta ser, es uno de los propósitos que tenían los surrealistas, quienes decían que la voz más auténtica que teníamos era la voz del subconsciente”.

Esta disociación entre lo falso y lo auténtico de un ser humano que se expresa en su consciente y subconsciente, “es la gran tragedia de este mundo moderno”.

“Yo conscientemente puedo decir que soy muy bueno y que soy muy ejemplar y que tengo mucha consciencia social, etc., muchas cosas así, pero inconscientemente sigo teniendo todos los perjuicios de todos los demás”.

A través del realismo simbólico del escritor se exponen binomios antagónicos: el amor y el desamor, la memoria y el olvido, todos relacionados con otro elemento que los sueños modifican, el tiempo, para construir fábulas crónicas, reescritas para este libro, y por tanto renovadas, con que Era le apuesta al género del cuento.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -