■ Reciente censo avista 2 mil ejemplares de 100 reintroducidos en 2010: delegado de Semarnat
■ Su regreso permite se regeneren pastizales, así como la proliferación de depredadores naturales
Va en recuperación la población de perritos de la pradera en el semidesierto zacatecano, esto luego de que en 2010 fuera reintroducidos 100 ejemplares ante la extinción de esta especie protegida.
Así lo dio a conocer el delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Julio César Nava de la Riva, quien señaló que este proyecto ha resultado exitoso pues en el último censo se avistaron 2 mil ejemplares del perrito de la pradera y se han extendido colonias hacía otros lugares.
Refirió que hace cinco años se llevaron los 100 especímenes del perrito de la pradera en una zona del desierto zacatecano y después se tuvo la oportunidad de hacer una liberación con lo cual a la vez se ayudó a hacer diversificaciones en la genética.
El delegado estatal detalló que con la reintroducción del perrito de la pradera no sólo esa colonia creció, sino que se han extendido a otros lugares y esto no sólo provoca la protección de la especie, sino también la recuperación de pastizales y ecosistemas, así como la generación de condiciones para que otras especies que están por encima de la cadena alimenticia proliferen y tengan alimento.
Entre ellos se incluyen las víboras, depredadores como coyotes y algunos rapaces como es el águila real, de modo que el perrito de la pradera representa mucho para la conservación de los ecosistemas y otras especies que están encima en la cadena alimenticia.
Nava de la Riva explicó que en su momento la extinción del perrito de la pradera en el norte de Zacatecas fue provocada por su cacería y captura, así como la alteración de su hábitat natural, por lo que aún se le mantiene como una especie protegida y se trabaja para que siga creciendo su repoblamiento.
Tras su desaparición de Zacatecas se decidió traer de otros estados. En aquel entonces se acabó con el espécimen porque la gente lo vendía y había quienes lo utilizaban como mascota, para tenerlos cautivos o bien como alimento. Explicó que después de su extinción se dejaron de generar pastizales y por ende la infiltración de agua al subsuelo. Agregó por tanto que el perrito de la pradera tiene gran potencial ecológico.
