En Zacatecas, 80 por ciento de los alumnos de primaria y secundaria es afectado por alguna forma de violencia escolar e incluso el 28 por ciento de ellos ha llevado o portado armas, blanca o de fuego, al menos una vez, según el resultado arrojado por la primera Encuesta sobre Violencia Escolar en el Estado de Zacatecas, elaborada por el académico Manuel Ibarra Santos, en conjunto con la sección 34 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Las regiones en donde la violencia es grave, en orden descendiente son: (1) Fresnillo, (2) Zacatecas, (3) Tlaltenango, (4) Guadalupe, (5) Río Grande, (6) Valparaíso, (7) Jerez, (8) Loreto y (9) Sombrerete.
Mientras tanto, las regiones donde es más común que los alumnos porten armas blancas o armas de fuego son: (1) Guadalupe, (2) Nochistlán, (3) Río Grande, (4) Sombrerete, (5) Jalpa, (6) Fresnillo, (7) Jerez y (8) Loreto.
Además, el resultado señala que el fenómeno de la violencia escolar, como problema educativo y social, carece de un tratamiento especializado y profesional, razón por la cual está impactando negativamente en los procesos de enseñanza – aprendizaje, en la vida de la sociedad actual y en la estructura de la familia contemporánea.
A manera de conclusión, se establece que, para atender, procesar y resolver los problemas derivados de la violencia escolar se requiere implementar nuevas políticas públicas que aborden el fenómeno desde una visión más especializada.
Otro de los datos que ofrece la encuesta es que 76 por ciento de los docentes consultados afirman que la organización escolar carece de personal especializado (psicólogos, psiquiatras, médicos, etc.), que ayuden al abordaje y atención del problema de la violencia escolar.
Asimismo, 82 por ciento de los docentes encuestados manifestaron no contar con planes y programas de desarrollo curricular que contribuyan a desarrollar una mayor capacitación entre los profesores para abordar con eficiencia los efectos de este fenómeno agravado por el uso, manejo y tráfico de drogas ilícitas.
El estudio revela en ese sentido que 5 por ciento de los alumnos encuestados de educación primaria y secundaria, y 12 por ciento de los docentes, respondieron que es fácil el acceso a alguna droga en el contexto de la escuela.
La encuesta que se incluye en el libro La Violencia Escolar en el Estado de Zacatecas y sus Consecuencias, obra coordinada por el propio Ibarra Santos y actualmente en proceso de edición bajo auspicio de la sección 34 del SNTE, detalla que “los profesores reconocen que el problema de la violencia escolar no es un asunto aislado de la escuela y que este fenómeno es una manifestación de la propia violencia que se vive en el contexto social, que se transmite y difunde por los medios de comunicación y que se reproduce en la institución educativa”.
Asimismo, explica que el problema de la violencia escolar es multidimensional y por lo tanto hay varias respuestas que involucran las dimensiones pedagógico/educativas, sociológicas, económicas, psicológicas, jurídicas, de seguridad pública y de la administración e impartición de la justicia.
Como se mencionó, de los alumnos encuestados, 28 por ciento afirmó haber llevado o portado, por lo menos en alguna ocasión, arma blanca o de fuego, mientras que en 45 por ciento de los planteles educativos se han registrado actos vandálicos de robo, lo que remite a la exigencia de promover un vasto programa de seguridad y protección de la infraestructura escolar.
Por otra parte, 12 por ciento de los alumnos acepta que por lo menos alguna vez ha sido agredido por los maestros; 16 por ciento de los docentes, en cambio, señala haber sido agredidos por algún alumno.
En ese sentido, más de 50 por ciento de los profesores reconocen que es importante que los padres de familia asuman una actitud más responsable en la atención y procesamiento de los problemas de violencia escolar.
Ante esa situación, 56 por ciento de los maestros opina que sería justificada la posibilidad de intervención de los órganos de justicia penal para abordar jurídicamente los casos graves de violencia escolar. Aunque 60 por ciento de ellos se oponen a la presencia de los cuerpos policiacos en la vida interna de la escuela.
Otro aspecto que expone la encuesta es que los medios de comunicación en general y particularmente las redes sociales y el Internet juegan un papel fundamental en la amplificación del fenómeno de la violencia escolar, además de que la feminización de los niveles de violencia escolar han crecido y se ejercen en la mayoría de los casos en porcentaje más elevados.
La metodología explica que el estudio se realizó con un muestreo probabilístico estratificado, simple aleatorio, utilizando la entrevista como técnicas de recolección de datos y el programa SPSS para el análisis e interpretación de los mismos. Los principales sujetos de estudio fueron alumnos de cuarto, quinto y sexto grado de primaria; segundo y tercero de secundaria, y docentes de nivel básico.
El tamaño total de la población de alumnos fue de 133 mil 591, de los cuales 77 mil486 fueron de primaria y de secundaria por regiones federales 56 mil 105. En lo que respecta a docentes, el tamaño de la población fue de 12 mil 423; 6 mil 673 de primaria y 5 mil 750 de secundaria.
El tamaño de muestra fue de 460 cuestionarios aplicados a docentes, con un nivel de confianza de 97 por ciento; y 570 aplicados a los alumnos, con un nivel de confianza de 98 por ciento. Ambas con un margen de error de 3 por ciento.
El libro La Violencia Escolar en el Estado de Zacatecas y sus Consecuencias aborda diversas aristas de ese fenómeno y los ensayos son autoría de Juan Martell Muñoz, Saúl Robles Soto, Sergio Contreras Padilla, Claudia Cecilia Flores Pérez y el propio Ibarra Santos.
