23.1 C
Zacatecas
jueves, 28 marzo, 2024
spot_img

Se inicia en Perú intento crucial para frenar cambio climático

Más Leídas

- Publicidad -

Por: La Jornada • Araceli Rodarte •

Lima. Reanimadas por las nuevas metas que se impusieron China y Estados Unidos —los mayores contaminadores atmosféricos del mundo-, las conversaciones de la ONU sobre el calentamiento global se reanudan el lunes en un ambiente de inusual optimismo, a pesar de la evidencia de que el cambio climático generado por el hombre es una realidad y tiende a agravarse.

- Publicidad -

Negociadores de más de 190 países se reunirán en la capital peruana durante dos semanas con el fin de elaborar proyectos para un acuerdo climático mundial que habrá de aprobarse el año próximo en París.

Lograr que todos los países lo acepten será una prueba crucial para las conversaciones auspiciadas por las Naciones Unidas, que durante más de dos décadas no han logrado disminuir las emisiones de los llamados gases de efecto invernadero a los que se atribuye el calentamiento global.

Los compromisos del presidente chino Xi Jinping y de su homólogo estadounidense Barack Obama hechos hace unos días para limitar sus emisiones después de 2020 fueron una poderosa señal de que el año próximo podría alcanzarse un acuerdo global. Los dos países, que en conjunto producen alrededor del 40 por ciento de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, son añejos adversarios en las negociaciones climáticas en la ONU.

«El cambio climático no será resuelto solamente por Estados Unidos y China. Pero sin duda no se resolverá sin ellos», declaró la costarricense Christiana Figueres, secretaria ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, a The Associated Press.

Meses atrás, la Unión Europea anunció una meta de emisiones para 2030, con lo que ya los tres mayores contaminadores del mundo se han comprometido a reducciones específicas. Ahora la esperanza es que otros países que también contaminan mucho, como la India, Japón, Rusia y Australia, fijen sus metas.

En Lima, los delegados esperan especificar qué información debería ser incluida cuando los países presenten sus metas formales de emisiones a principio del año próximo, de forma que dichos objetivos puedan ser comparados entre sí. Sin embargo, hay escasas expectativas de que los negociadores lleguen a acuerdos sobre plazos cuyo cumplimiento pueda ser exigido por medios judiciales.

Estados Unidos y otros países se oponen a un tratado sobre emisiones legalmente vinculante, el cual enfrentaría una rígida oposición en el Congreso controlado por el Partido Republicano.

Hace un mes, el panel de expertos de la ONU sobre cambio climático advirtió que el aumento en las temperaturas globales tendría efectos irreversibles sobre la gente y los ecosistemas a medida que se derriten glaciares, se elevan los niveles del mar, se intensifican las olas de calor y los océanos se vuelven más cálidos y ácidos.

El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático indicó que ahora se tiene un 95 por ciento de certeza de que los seres humanos son los responsables de la mayor parte del calentamiento, principalmente por la quema de petróleo, carbón y gas. Esas emisiones siguen aumentando debido a que los combustibles fósiles alimentan la expansión de China y de otras economías emergentes.

Los delegados se reunirán en un país especialmente amenazado por el impacto del cambio climático.

«Perú es golpeado desde todos los ángulos», dijo Walter Vergara, destacado experto latinoamericano en el cambio climático que solía trabajar en el Banco Mundial. «Muchos ecosistemas se verán afectados».

La nación andina tiene el 70 por ciento de los glaciares tropicales del mundo, que se están derritiendo a un ritmo acelerado, lo que pone bajo intensa tensión a unos 300.000 habitantes de tierras altas, ya que las pasturas y las tierras cultivables se secan paulatinamente.

Esos glaciares han perdido más de una quinta parte de su masa en sólo tres décadas, y el 70% de los 30 millones de habitantes de Perú —los que viven en el desierto costero del Pacífico— dependen del agua que se derrite de los glaciares para propulsar hidroeléctricas e irrigar cultivos, lo que significa que su electricidad y seguridad alimentaria a largo plazo también podrían estar en riesgo. El incremento en las temperaturas alpinas está provocando la muerte de especies de plantas y animales en bosques nubosos, y los científicos pronostican que la pesca en el Pacífico también se verá afectada.

El objetivo general de las conversaciones de la ONU es mantener el aumento en la temperatura global por debajo de 2 grados centígrados (3,6 grados Fahrenheit) en comparación con la era preindustrial. Eso requeriría la adopción a gran escala de fuentes renovables de energía y, tal vez, capturar el dióxido de carbono que ya está en el aire y almacenarlo bajo tierra.

El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente advirtió semanas atrás que hay una creciente brecha entre lo que los países prometen hacer para controlar la contaminación con carbono y lo que los científicos dicen es necesario efectuar para alcanzar esa meta.

Y los datos globales recabados sobre la temperatura en 2014 muestran que este año se encamina a ser uno de los más cálidos —si no es que el más cálido— del que se tenga registro.

«Seguimos avanzando en la dirección equivocada», dijo Andrew Steer, director del Instituto de Recursos Mundiales, un grupo ambientalista con sede en Washington.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -