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jueves, 28 marzo, 2024
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Como antes de la Revolución, Zacatecas sigue en el subdesarrollo: investigador

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Por: RAQUEL OLLAQUINDIA • Araceli Rodarte •

■ Los bajos salarios conllevan la permanencia del “círculo vicioso de la pobreza”: Burnes

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■ El estado requiere hoy un nuevo pacto social entre sus sujetos económicos y sociales, opina

Las condiciones en las que viven Zacatecas y sus habitantes, desde antes de la Revolución hasta ahora, no han tenido cambios positivos, “pues seguimos en el subdesarrollo”, aseguró el docente investigador de la Universidad Autónoma de Zacatecas, Arturo Burnes Ortiz.

Esta situación de subdesarrollo se ha mantenido debido a que ha existido una “modernización trunca porque no se ha completado con un despegue de adentro y de abajo”, centrada en las actividades económicas tradicionales de la entidad.

El académico, en el marco de la conmemoración del 20 de noviembre, hizo una comparación, con las similitudes y diferencias que existen, entre el Zacatecas actual y el de antes de la Revolución Mexicana.

En este sentido, destacó como diferencia fundamental que ahora “el modelo liberal tiene la sartén por el mango, le favorece todo: la correlación de fuerzas, la política restrictiva a su favor, concentradora, la coyuntura mundial, la pasividad y la desmovilización”.

Entre las semejanzas, igualmente negativas, que se tienen entre ambas etapas de la historia en Zacatecas, mencionó los bajos salarios que perciben los trabajadores, lo que conlleva la permanencia del “círculo vicioso de la pobreza”.

Asimismo, señaló como similitud con los años previos a la Revolución el hecho de que continúa sin haber una clase política y económica regional fuerte, lo cual deriva en que “les come el mandado la inversión foránea”.

En esta última semejanza, Burnes Ortiz precisó que hay una diferencia fundamental, puesto que anteriormente esa presencia de capital extranjero era principalmente en el sector minero, mientras que ahora se refleja en otras ramas como la de las maquiladoras, la industria y el comercio.

Para cambiar estas condiciones que han persistido desde antes de la Revolución, aseveró que el actor principal debe ser el propio Estado a través de una propuesta de diversificación económica local y regional, para aprovechar el potencial que existe en los diferentes estados y el que tienen sus habitantes.

Insistió en que las autoridades no deben perder de vista el fortalecimiento de las actividades que tradicionalmente han tenido mayor presencia en la economía de la entidad, como es el caso en Zacatecas del sector agropecuario.

Al respecto, el docente investigador de la Unidad Académica de Economía puntualizó que este impulso y apoyo debe enfocarse al campo zacatecano, para poder garantizar una seguridad alimentaria.

No obstante, aparte del Estado, subrayó que tienen que participar en estas acciones tanto el sector empresarial, como los trabajadores y la sociedad en general.

Estas condiciones que prevalecen en el estado permiten aseverar que “Zacatecas requiere hoy un nuevo pacto social entre sus sujetos económicos y sociales” que actúen de manera transparente, responsable, proactiva y crítica; en pro de combatir la inseguridad y conformar un mercado interno que se convierta en la garantía para el despegue real del desarrollo.

Burnes Ortiz reconoció que la situación que se vive en todo el país, también en Zacatecas, es de crispación, una “coyuntura decisiva”, en la que se han desnudado los alcances y las limitaciones del sistema actual.

Sin embargo recalcó que, a diferencia de otras opiniones que han llegado a equiparar este momento histórico con el preludio de la Revolución Mexicana, él considera que hay una distancia amplia entre una época y otra porque, ahora, hay ausencia de un elemento fundamental: una alternativa.

Por ello, aunque aseguró que es muy importante la crisis para que haya un cambio social, se requiere hacer un análisis de las posibilidades de futuro que existen y de las que se pueden llegar a conformar por parte de la sociedad civil, con el acompañamiento de intelectuales y de partidos políticos, así como de la clase política por otro lado.

En este sentido, el académico concluyó que no deben caer en el “pragmatismo terrible de la actualidad”, sino que hay que plantear un auténtico proyecto de desarrollo regional; la protesta no basta, tiene que agregarse la propuesta”.

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