■ Atentado contra normalistas, producto de la política de terror promovida por el Estado, aseveran
■ La corrupción es una de las causas que ha llevado al país a la actual situación, enfatizan
El atentado contra los normalistas de Ayotzinapa el 26 de septiembre pasado, fue producto de los nexos de funcionarios de los tres niveles de gobierno con el narcotráfico, la política de terror promovida por el Estado, el ataque a la educación pública, la corrupción y el enriquecimiento de los gobernantes a costa de la pobreza de la población.
Así lo afirmaron estudiantes zacatecanos de diversas instituciones de educación superior, durante una nueva marcha realizada en la capital del estado para exigir la presentación con vida de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero, que concluyó con un mitin en Plaza de Armas.
Los jóvenes se pronunciaron contra el sistema partidocrático nacional, puesto que directa o indirectamente es responsable de la crisis social en que se encuentra el país y no representa los intereses populares.
Exigieron a la Legislatura, el Ejecutivo y el Consejo Universitario de la UAZ, máximo órgano de gobierno de esa institución, emitan una postura “clara y contundente” sobre los hechos de violencia perpetrados contra los estudiantes normalistas de Guerrero.
También afirmaron que la desaparición forzada de los estudiantes en Iguala no es un hecho aislado, puesto que las muertes y desapariciones, durante mucho tiempo, han sido la carta de presentación de México en el mundo.
De acuerdo con un comunicado leído al concluir la marcha, la corrupción es una de las causas que ha llevado al país a la actual situación, ya que en los tres niveles de gobierno hay estrechos vínculos de sus funcionarios con el crimen organizado.
Ante esa situación, exigieron que en Zacatecas se aclaren actos de corrupción en funcionarios públicos y responder a las denuncias ciudadanas que señalan su enriquecimiento
ilícito.
“Rechazamos la violencia generada por el Estado e instituciones privadas contra movimientos sociales y grupos comunitarios que se atreven a luchar y resistan por sus derechos. En ese tenor, exigimos que se esclarezca el papel que juega Gobierno estatal en el caso de Salaverna, donde las empresas mineras han actuado con la venia de autoridades para despojar a los campesinos de su tierra”, agregó la estudiante.
Otro aspecto del que manifestaron su inconformidad, es la iniciativa de ley presentada por el diputado Rafael Flores Mendoza, mediante la cual “se intenta establecer en el estado una Ley Mordaza, violentando así la libertad de expresión y derecho de los ciudadanos a denunciar y señalar públicamente a los funcionarios que incurren en actos de corrupción”. Denunciaron también que la militarización es una estrategia de Estado que justifica los asesinatos extrajudiciales, desapariciones forzadas y violaciones a los derechos humanos.
Por otra parte, reconocieron en la lucha de las Normales Ruales, la exigencia por mejorar las condiciones educativas en el país, por lo cual los estudiantes zacatecanos “nos sumamos a la defensa por la educación pública”.
La violencia, añadieron los jóvenes, es un daño colateral de la situación en que se encuentra la mayoría de la población.
En consecuencia, son los adolescentes o jóvenes que carecen de oportunidades los que engrosan las filas del crimen organizado y, por lo tanto, exigieron que las autoridades no firmen pactos que sólo benefician al sistema político e intereses, sino que signen nuevos compromisos con las instituciones públicas y Normales Rurales.
Por último, reiteraron la demanda de presentar con vida a los 43 normalistas desaparecidos y que se den a conocer avances concretos, no mediáticos, sobre el proceso de búsqueda, además de que todos aquellos funcionarios incompetentes abandonen su cargo.
