■ Coinciden en que lo sucedido en Guerrero es inherente al modelo económico neoliberal
■ Necesario, reinventar y rediseñar el país; “el cambio no puede venir de arriba”: Delgado
En el segundo día de paro de actividades en la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), profesores de la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo y Psicología, además de estudiantes, participaron en el panel denominado Ayotzinapa: mesa de análisis para la reflexión y la acción colectiva, en el que coincidieron en que el hecho ocurrido con los normalistas es parte de la violencia sistémica inherente al modelo económico neoliberal.
El investigador Raúl Delgado Wise manifestó que más allá de la indignación y la rabia ante lo ocurrido con los normalistas, es importante que haya un proceso de reflexión colectiva respecto a ese hecho y lo que la sociedad puede y debe hacer.
“Lo importante es que tomemos conciencia de que lo ocurrido en Ayotzinapa no es un hecho aislado. Debemos tener una memoria histórica y conocer las raíces del problema, porque que todo esto es parte de las violencias sistémicas inherentes al modelo económico que se ha impuesto en México y del sistema político que lo sostiene, me refiero al neoliberalismo como proyecto económico, polítio, social y cultural que se ha enquistado en el país y también a la crisis civilizatoria en la que estamos inmersos”, expresó.
Al respecto, dijo que el tema del neoliberalismo generalmente se habla en la superficie y poco se entiende acerca de lo que significa y de las implicaciones reales, incluso entre académicos de izquierda y fuerzas sociales progresistas.
En consecuencia, no se entiende el trasfondo del problema y las vías para atacarlo, “estaremos condenados a actuar defensiva y reactivamente, en vez de construir juntos formas eficaces de resistencia, con el objetivo de avanzar hacia procesos de transformación profunda”, indicó Delgado Wise.
Desde su punto de vista, es necesario reinventar y rediseñar el país, debido a que la globalización neoliberal es un proyecto corporativo e imperialista comandado por Estados Unidos, surgido desde la década de los 70 del siglo pasado y profundizado con el derrumbe de la ex Unión Soviética y la incorporación de China al mercado capitalista mundial.
Como resultado de ese modelo, el académico expuso que México es el único país de América Latina donde la pobreza creció en la última década y cuyo nivel es de 40 por ciento de la población según la Cepal, el doble de la pobreza que existe en Brasil y 10 veces más que en Argentina o Chile.
En el contexto de la acentuación de esas políticas neoliberales y sus violencias sistémicas, concluyó que “el cambio no puede venir desde arriba, no podemos ser ingenuos, porque el Estado y sus esferas Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como sus niveles de gobierno federal, estatal y municipal, es parte de este engranaje, y la clase política está claramente comprometida con el modelo neoliberal y Ayotzinapa es una clara muestra de ello”.
Los llamados poderes fácticos, agregó Delgado Wise, también son parte de ese “engranaje perverso”, y aunque se habla siempre de las televisoras, los multimillonarios y el crimen organizado, también se debe incluir el poder corporativo multinacional, mientras que el Estado en México opera como títere.
Reiteró entonces que el cambio solamente “podrá venir desde abajo”, para lo cual se requiere un agente de transformación social, lo que implica formas alternativas de convivencia, una organización de democracia directa y participar en movimientos como el zapatismo, las juventudes comunistas, los Sin Tierra, los Piqueteros, entre otros.
