l Se lidia con toros de los ranchos Pilar Labastida, La Paz y Venta de Romero
Ante una muy buena entrada, se lidiaron a muerte siete toros la quinta corrida de feria: uno de Pilar Labastida para el rejoneador Andrés Rosso y 5 de la Venta de Romero y uno de La Paz para los alternantes de a pie: Octavio García El Payo, Arturo Saldívar y Diego Silveti.
Andrés Rosso (de verde botella y negro), recibió a Caudillo, número 55, de 481 kilogramos. -negro, enmorrillado-, un toro manso, que tendió a quedarse parado. No hubo suerte para el rejoneador colombiano, quien falló reiteradamente con las banderillas y con el rejón de muerte: despachó al quinto viaje.
Octavio García El Payo (de grana y oro), tuvo en suerte a Viva México -negro, entrepelado, listón, sobaquero, meano y cornidelantero-, un toro débil desde inicio al que se le torea brevemente con el capote y recibe poco castigo en los caballos. El toro sólo permitió ser toreado por derechazos que El Payo le robó, pues Viva México se engatilló, pasaba con poca fuerza, por momentos salía suelto y no tuvo transmisión. Voluntarioso el torero ante un toro carente de calidad. Despachó al segundo viaje con tres cuartos de estoque caído. Palmas.
Su segundo toro, Independiente, No. 128, de 488 Kg. -cárdeno oscuro, listón, cornidelantero-, como los otros, fue toreado levemente con el capote. Con la muleta la labor fue derechista ante un Independiente que embestía con fuerza y transmisión y que en el desarrollo de la lidia se hizo mirón. Buenas tandas con voluntad de agradar pero sin terminar de cuajar al toro del todo. Dejó una estocada en inmejorable sitio al segundo viaje. Salida al tercio.
Arturo Saldívar (de obispo y oro), recibió a Conspirador, No. 94, de 488 Kg. -cárdeno, nevado de los cuartos traseros, bragado corrido, enmorrillado, cornidelantero, tocado del pitón derecho, caribello-, toreado a la verónica y rematado por reboleras. Apenas señalado en los caballos. Saldívar inicia con derechazos templados, alargando el trazo, mandando y haciendo que embista con calidad; cuatro tandas de derechazos buenos, cuidándolo mucho porque al toro le falta un punto de fuerza y desarrolló sentido. Por naturales Conspirador no tiene recorrido. Termina por derechazos su labor ante un toro que al final tuvo embestida incierta y complicada. Deja media estocada muy defectuosa, pero letal. Silencio.
Recibió al quinto, Chucho, No. 85, de 531 kg. -cárdeno oscuro, sobaquero, meano, corniapretado-, que salía suelto y fue toreado por verónicas rematando al soltar la punta del capote. Saldívar lo bregó elegantemente para llevarlo a los caballos donde recibió leve castigo en varas. En el quite, Chucho parecía tener acalambrados los cuartos traseros.
Brinda al respetable. El toro resultó débil pero metió bien la cabeza y embestía por momentos con calidad, lo que aprovechó Saldívar, toreándolo con calma por derechazos y naturales -buen lado pero el toro claudicaba más-. Voluntarioso. Despachó al segundo viaje con un pinchazo hondo, tendido. Palmas.
Diego Silveti (de manzana y oro) tuvo en suerte a Corregidor, No.88, de 459 Kg. -castaño, listón, ojinegro, bocinero, sobaquero, acucharado-. Poca labor con el capote y poco castigo en varas. Brinda al respetable. Las primeras tandas de derechazos el toro tuvo fuerza y embestidas descompuestas, que empezó a mejorar a partir de la tercera, aunque salía con la cabeza arriba y las manos por delante. Fue mejor por derechazos. Dejó una media, trasera y caída pero efectiva.
El último de la tarde, Pípila, No. 110, de 476 kg. -cárdeno oscuro, enmorrillado, salpicado de los cuartos traseros, acucharado-, fue toreado a la verónica y rematado con una media. Desde inicio evidencia debilidad, por lo que en varas apenas le partieron pelo. Muy buenos el primero y el tercer par de banderillas de Cristhian Sánchez, que le valieron la salida al tercio. Brinda a Pedro Lara. Con la muleta en la mano derecha, lo llevó a los medios y ahí lo toreó con clase haciéndole buenas tandas por ese lado, cortas, pues el Pípila también muestra un punto de debilidad. Por naturales es probado también, pero es mejor por derechazos; por esa senda continúa su labor muleteril. El torero otra vez con mucha voluntad, pero el toro no dio para más. Termina por manoletinas. Al segundo viaje dejó una media estocada, tendida y trasera. Acierta al primer golpe de descabello.
