■ Protección Civil, mediante sus unidades municipales, hará recorridos a los espacios de agua
■ Represas en Villanueva y Tepechitlán superan ligeramente 100% de su capacidad, señala
Debido a las lluvias que se han registrado en Zacatecas, las cuales han permitido la recuperación de las presas y bordos del estado, pero también han provocado algunas inundaciones, el gobernador Miguel Alonso Reyes ordenó mantener una vigilancia permanente para prevenir posibles riesgos a la población, se informó mediante un comunicado.
Destacó que las precipitaciones pluviales registradas en mayo, junio y lo que va de julio, han sido muy buenas para la agricultura y la ganadería, pues en el estado se siembran más de un millón de hectáreas de temporal, además de que se ha podido continuar con la recuperación de agostaderos.
No obstante, dijo, las presas Palomas y Julián Adame de Villanueva superan ligeramente 100 por ciento de su capacidad, así como La Villita, ubicada en el municipio de Tepechitlán.
Por ello, giró instrucciones a la Secretaría General de Gobierno para que mediante la dirección Estatal de Protección Civil se mantenga en alerta permanente y coordine recorridos frecuentes de las unidades municipales de Protección Civil.
Estas acciones se suman a los recorridos diarios que realiza el personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), con la que Gobierno del Estado mantiene colaboración.
De acuerdo con la información proporcionada al Ejecutivo estatal, el promedio de almacenamiento de agua en las presas del estado es de 69 por ciento, sin embargo existen casos como la presa Lobatos en Valparaíso que se registra 97.8 por ciento de su capacidad.
Otros casos que han acumulado almacenamientos importantes son la presa Ramón López Velarde, en Jerez, con 85.9 por ciento de su capacidad; El Cazadero, en Río Grande, con el 85 por ciento de su capacidad, así como la Leobardo Reynoso y Santa Rosa, en Fresnillo, con 80.3 y 79.8 por ciento de su capacidad.
Alonso Reyes precisó que en caso de contingencia, Gobierno del Estado está preparado para atender a la población con alimentos, despensas y enseres domésticos que se canalizan a través del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF) y la Oficina de Atención Ciudadana.
