■ En discusión participantes comparten sus opiniones y cuestionamientos sobre el tema
Desde los años 70 la lucha por los derechos humanos de la comunidad lésbico-gay ha dejado grandes pérdidas humanas pero también ha logrado, junto con otras minorías, ganar campo en el sentido de la legalidad y la justicia, opinaron los asistentes al pasado Martes de Documental y Ciencia de Ficción, donde se mostró el documental Milk, de Gus Van Sant.
Sin embargo, la ardua lucha no ha logrado llevar a la sociedad a una opinión general y concluyente al respecto de las singularidades de las minorías, la polémica es algo tan cercano que bastó la exposición de este tema en un grupo para que las opiniones radicalmente diferentes surgieran y enriquecieran la discusión.
Cada opinión resultó ser valiosa en relación a las concepciones que actualmente se tienen al respecto de la homosexualidad, pues cada uno de los participantes aportó argumentos a favor y en contra de los derechos humanos para esta comunidad. Las opiniones incidieron en se extendieron desde el campo de la ciencia, de la religión, de las experiencias personales, desde la historia y los estudios sociales, de la vida cotidiana misma… apuntando más que nada hacia si la homosexualidad es una condición natural humana, un designio divino o una elección personal.
Sobra decir que la discusión no llevó a conclusiones ni acuerdos, si no al reconocimiento o al menos al intento de dar lugar a las diversas opiniones confrontadas.
En la exposición también se habló de cómo a lo largo de la historia de la humanidad, la homosexualidad ha estado presente, más libre o más penada dependiendo del momento histórico específico en que se manifiesta.
Por otro lado, ninguna institución social es capaz de regular las manifestaciones de la sexualidad, pues este aspecto de los seres humanos no se circunscribe solamente a la conducta que podemos encontrar en lo cotidiano, lo cual sabemos a partir de la investigación psicoanalítica respecto a la sexualidad –uno de los principales conceptos freudianos-.
