- ENTRE SU REPERTORIO TRANSITÓ POR ESTILOS MUSICALES DESDE EL RENACIMIENTO HASTA EL SIGLO 20
- El artista grabó un disco cuando tenía 12 años; actualmente continúa con su formación
Abel García Ayala pertenece a la última generación del Centro para la Investigación y Desarrollo de la Guitarra (Cideg, A.C.), un proyecto desarrollado en el emblemático Paracho, Michoacán, que fue destacado en la presentación la noche del sábado, dentro del Ciclo de guitarra clásica, como cuna de una generación de jóvenes talentos.
El artista ofreció un recital cuyo repertorio transitó por el Renacimiento, el Barroco y el Clasicismo, hasta llegar al siglo 20, en una audición inserta en el programa del Festival Cultural Zacatecas 2014.
En breve entrevista con La Jornada Zacatecas, García Ayala, quien en este momento cuenta con 18 años de edad recién cumplidos, y un disco grabado a los 12, donde incluyó piezas básicas para la formación de un artista en su instrumento, comentó que su vocación se debe al vínculo que su padre ha tenido con la laudería y por ende, el contacto con intérpretes de instrumentos de cuerda, concretamente, guitarristas.
Abel García dijo no recordar cómo inició su formación, pero precisa fue a los 7 años que se involucró en el estudio de la guitarra.
Ahora, señala, lo hace “de manera muy natural”, más como hobbie que como profesión. Sin embargo, actualmente se prepara profesionalmente en el Conservatorio de Música de las Rosas de Morelia, Michoacán, con Rodrigo Neftalí.
El objetivo cercano del joven es concluir su formación en México dice aludiendo a su sentido patriótico, para “representar bien al país”. Sus miras se dirigen posteriormente a dar continuación en Alemania o España.
Pese a su corta edad tiene una sólida trayectoria que incluye clases magistrales con Juan Carlos Laguna y Leo Brouwer, entre más de 14 destacados instrumentistas.
Tras clausurarse el proyecto Centro para la Investigación y Desarrollo de la Guitarra (Cideg, AC), de lo que señala como causas cuestiones políticas y económicas y donde permaneció por dos años, recibió clases particulares de Rodrigo Neftalí y Francisco Gil, en Morelia, comentó.
En Zacatecas incluyó en el repertorio al zacatecano Manuel María Ponce (1882-1948) con Tema, Variado y Final y Sonata IV, y piezas de John Dowland (1563-1626), Luigi Legnani (1790-1877), Mauro Giuliani (1781-1829) y Mario C. Tedezco (1895-1968).
Se mostró “muy agradecido de poder estar aquí en este festival tan grande, que es muy importante en México y sobre todo aquí en Zacatecas” y destacó de ello la oportunidad que se ofrece a los jóvenes en plena formación, “porque nos ayuda a romper con los nervios. Y es una muy buena labor”.
Sobre su padre, Abel García López, quien este día ofrecerá la conferencia La Lyra da Braccio de Leonardo Da Vinci, dentro del programa académico del festival que se desarrolla en el teatro Fernando Calderón, añadió, que su formación como músico, pintor e ingeniero eléctrico le ha permitido realizar magníficos instrumentos reconocidos alrededor del mundo.
Abel García, no descarta dedicarse a la profesión de laudero, lo siente dijo, “hasta como un compromiso”, pero en este momento se centra en “su mundo”, que es la música. n
