Sandra Mendoza Barrera, presidenta de la asociación civil Por la Tierra, impartió a docentes y directivos de la Benemérita Normal Manuel Ávila Camacho la conferencia Carta de la Tierra: Educación para un Estilo de Vida Sustentable, con el objetivo de impulsar, al interior de esa institución, principios para construir una sociedad justa y sostenible.
Según expuso, la Carta de la Tierra es un marco ético, formado por principios y valores, con la intención de construir una sociedad global justa y sostenible, para lo cual se han establecido diversos preceptos.
“La Carta de la Tierra, a través de valores y principios éticos, una vez que se conocen, invita a que se vivan y se practiquen. Se maneja entonces una cuestión holística y humanista donde los maestros estuvieron conviviendo bajo esos principios”, indicó.
En México, informó, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) es la que ha suscrito La Carta de la Tierra, por lo cual ese organismo es responsable de promover la conformación de una sociedad justa, sostenible y pacífica en todo el país.
Para ello, Mendoza Barrera comentó que la labor consiste en aglutinar organizaciones civiles, empresas y personas físicas, de manera que muchas de ellas se han sumado a La Carta de la Tierra, entre éstas, organismos como la Canacintra.
En Zacatecas, informó que solamente dos personas morales han suscrito esa carta, y son la asociación civil Por la Tierra y la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), la cual debe avalar la carta en cada cambio de rectoría, pues se trata de un compromiso adquirido para trabajar los principios y valores de esa iniciativa al interior de la institución.
“En ese sentido, explicó que esa iniciativa “promueve un llamado a la acción, actuar para transformar: trabajar conmigo mismo, y luego transformar mi entorno. Hay que tener una visión global para tener una aplicación local”, indicó.
Señaló entonces que la Carta de la Tierra puede trabajarse en el ámbito académico, en el arte, la espiritualidad, la religión, la educación, entre otros, motivo por el cual más instituciones se sumen.
Mendoza Barrera comentó entonces que los directivos de la Normal Manuel Ávila Camacho, al signar la Carta de la Tierra, deberán comprometerse con los valores y su implementación al interior, a fin de obtener un registro que tiene validez a nivel nacional e internacional.
