México, DF. En México como en otras partes del mundo, el teatro infantil, más que padecer una crisis, es muy pobre, porque se le apuesta a montajes de personajes conocidos en la televisión, en lugar de ofrecer propuestas nuevas e interesantes, aseguró el dramaturgo español José Ramón Florez.
Entrevistado a propósito del inicio de la temporada de la obra infantil “Kalabaza de Pippa”, en el Teatro “Ignacio López Tarso” del Centro Cultural San Ángel, el también compositor y productor señaló que no es nada fácil hacer teatro infantil, de ahí que generalmente se recurra a Disney o a los cuentos populares.
Consciente de que resulta complicado hacer teatro infantil, Ramón Florez sostuvo que aún y cuando esta disciplina está regida por la taquilla, se puede inventar algo, para no caer en la versión cinco mil de Blanca Nieves.
Indicó, además, que en México, los creadores prefieren no arriesgarse con propuestas novedosas y recurren a algo más identificable, como un cuento de navidad, para conseguir apoyos institucionales.
“Todo el mundo identifica a Blanca Nieves o Bob Esponja; se puede escribir un guión, en dos horas, de una historia de estos personajes, con siete botargas y cobrar un taquillaje alto, pero ese no es el objetivo del teatro infantil”, expuso «J.R. Florez», reconocido así en la escena musical.
“El teatro es tan importante para la formación de los niños y de la familia, que deberíamos tener espacios y precios más accesibles. Todo cuesta mucho dinero y no contamos con el apoyo, en mi caso, de nadie”, señaló.
Sobre “La Kalabaza de Pippa”, refirió que se trata de un cuento que viene a decir que todo es posible, si se desea con suficiente intensidad.
El montaje narra la historia de una niña traviesa que no quiere comer cosas que no le gustan y no le agrada casi nada, sólo quiere comer semillas de calabaza.
Sin embargo, detalló, de pronto descubre que no es que no le guste la comida, sino que no la a probado, por lo que al degustarlas descubre que están muy ricas.
De acuerdo con Florez, la propuesta habla de los problemas que enfrenta la infancia en todo el mundo: la mala alimentación, el cambio de hábitos alimenticios y la obesidad, a la vez que reflexiona sobre la importancia de los sueños y el respeto al medio ambiente y a los animales; “al final todo ésto, entre juego, canciones y bailes”, apuntó.
