Producir granos, como el frijol por ejemplo, es una tarea que hemos aprendido a desarrollar los zacatecanos desde hace muchos años, las tierras frijoleras del norte del estado son consideradas como las más productivas no solamente de México, sino de otras latitudes. Se siembra y se cosecha, cada año, un frijol de calidad, pero eso sí, hay que limpiarlo, hay que darle calidad, para que sea bien recibido en el mercado nacional o internacional.
Los campesinos, compañeros zacatecanos que en ocasiones se dejan llevar por los arranques de terceras personas, de líderes que usted o yo pudiéramos pensar que luchan por causas justas, por defender los intereses de esos seres humanos que de familia en familia y tradicionalmente han vivido entre los surcos, y que sufren año con año las inclemencias del tiempo, sean estas sequías o heladas tempranas, excesos de agua cuando les llueve mucho, como ha sucedido en este ciclo agrícola primavera verano, que les dejó muy buenas cosechas (dicen los que saben que fueron más de 350 mil toneladas), pero lamentablemente se presentaron a destiempo las lluvias y propiciaron el manchado del grano, efecto que trajo consigo la reducción del precio que previamente se había ya establecido en convenios y acuerdos logrados entre los representantes de los gobiernos estatal y federal, además de las organizaciones de campesinos, los que producen uy los que comercializan.
Ayer cientos, quizás miles de conductores de unidades motrices de todo tipo, que circulaban de sur a norte, a la altura de las oficinas de la Secretaría del Campo, se encontraron con la desagradable y angustiosa novedad de que la carretera federal había sido bloqueada por campesinos que protestaban por la falta de apoyos de Gobierno estatal. Impidieron la entrada a laborar del personal de la dependencia estatal, no conformes con esa acción, se dieron a la tarea de atravesar tractores sobre la cinta asfáltica, para impedir el paso al transporte, bloquearon literalmente la carretera federal, una acción que generó, desde las diez de la mañana y hasta las cuatro y treinta minutos aproximadamente, un caos terrible en este tramo de carretera, que se extendió hacia la carretera que viene de Saltillo, en las cuales prácticamente no había movimiento del transporte.
Las luchas por resolver o encontrar soluciones a problemas, son siempre válidas, sobre todo si existen razones bien sustentadas y en este caso, las protestas, el bloqueo, se debe al parecer, porque no se apoya a un grupo de productores que tienen adeudos millonarios con la Comisión Federal de Electricidad. Y ante ello surgen preguntas que requieren de prontas respuestas, por ejemplo: ¿Desde cuando existen esos adeudos?, ¿cómo empezaron?, ¿por qué no han podido pagar?, en fin, hay más interrogantes, pero si los mismos deudores se dieran a la tarea de contestarlas, tal vez se vieran resueltos sus problemas en un buen porcentaje.
La manera de actuar de aquellos que se ostentan como líderes, como cabecillas o representantes de campesinos, ya deberían de evolucionar porque si usted se toma la molestia de analizar las fotografías que se publican en los diarios locales, los revoltosos diría yo, son los mismos de hace 20 años, algunos empezaron su “carrera” en los inicios de gobiernos como el del doctor Ricardo Monreal, o más recientemente en el sexenio de la diminuta Amalia. Ni caso tiene citar nombres porque si don Lupe Cervantes viviera, les volvería a decir que se pongan a trabajar, que si ya saben producir, que se enseñen a comercializar.
Ciudad Administrativa, y aquellos que ahí trabajan, vivieron también un día difícil, alguien les bloqueó el acceso a sus áreas de trabajo. Y los frijoleros deberían de utilizar otros métodos para conseguir sus fines, porque lo que ayer hicieron tal vez les traigan consecuencias graves de carácter legal, habrá que ver, al tiempo. Porque ahora sí que el hubiera no existe. Y lo que ellos deben, ellos lo tienen que pagar o usted qué opina eh?
Son tiempos de hilvanar y cocer con finura, como en el rancho, porque cada día las dificultades son mayores y mayores los retos. No podríamos dejar de lado un suceso que ha marcado la historia de un municipio y de una comunidad: Sombrerete y Cantuna, un crucero que conduce a Río Grande o a Juan Aldama o Miguel Auza, y viceversa, de esos lugares hacia Sombrerete, hacia el norte o al sur, rumbo a Fresnillo. Ahí perdieron la vida varias personas, entre ellas el joven médico veterinario de profesión y alcalde del recientemente nombrado Pueblo Mágico:
Sombrerete, tierra de mineros, tierra de políticos, unos buenos, otros malos, a los familiares de aquellos que en este lamentable y trágico accidente perdieran la vida, les enviamos nuestras condolencias y rogamos por que encuentren una pronta resignación.
Ahora seguirán los días en los que quienes lo tengan que hacer, designen al presidente municipal interino, al que conduzca casi en su totalidad los destinos de este municipio, ya que quien murió, sólo estuvo al frente por escasos cinco meses.
Hasta aquí mi comentario, nos veremos en la próxima entrega, aquí en estos espacios semanales. ■
