■ El fresnillense imparte conferencia que destaca el valor de la técnica en la preservación del legado histórico
■ Comparte las experiencias en el oficio durante Diplomado en Periodismo Cultural
El fotógrafo fresnillense Pedro Valtierra impartió su conferencia magistral La fotografía como testimonio y creación cultural, en la que destacó que gracias a la fotografía un pueblo tiene memoria histórica y con ello se puede hacer referencia visual inmediata de acontecimientos, como la matanza de Tlaltelolco, el 2 de octubre de 1968.
La fotografía, agregó, conforma nuestra cultura y enriquece el espíritu, pues provoca emociones, llegando a producir placer, a conmover, enardecer, apaciguar e invitar al cuestionamiento de la comprensión.
Valtierra es considerado uno de los precursores del fotoperiodismo en México, y a través de su trabajo en el diario La Jornada, buscó dignificar el trabajo de los fotoperiodistas, quienes, dijo el artista, “eran considerados como técnicos solamente.”
Eso ocurrió hace 30 años, recuerda el fotógrafo, cuando presentó un proyecto a los directivos del diario para dar un trato diferente a los fotógrafos y resaltar el trabajo del reportero con una síntesis de imágenes. En esa época, recuerda que la foto estaba relegada de los diarios.
“Los fotógrafos trabajamos con la luz y los reporteros con el texto, y la foto no es un género menor, por lo que se propuso trabajar en coordinación con los reporteros para tener un mejor conocimiento de lo que se iba a trabajar”, mencionó Valtierra.
También se propuso que se estableciera un archivo fotográfico y que los fotógrafos resguardarán los negativos de las fotos.
Además, no se dejó morir a la fotografía después de publicarla, pues se buscó realizar exposiciones no sólo en la capital sino buscando pueblos y localidades para llegar a todos los públicos, así como editar suplementos donde se exhibieran, de forma mensual y anual.
También se buscó que cada foto tuviera el derecho de autor, y que los fotógrafos si requerían una foto para exponerla, podían sacarla del archivo, y si se lograba vender correspondía 40 por ciento de ganancia al fotógrafo y 60 por ciento al periódico.
La primera exposición fotográfica de La Jornada se realizó en Zacatecas teniendo como recinto el museo Pedro Coronel, donde se exhibieron cerca de 60 fotografías.
El lente de Valtierra captó la vida cotidiana de la Ciudad de México de los años 70 y 80, así como de Chiapas, el fenómeno del Niño Fidencio en Espinazo, Nuevo León; así como de lugares como Nicaragua, República Árabe, Haití, entre otros.
Su cámara retrató a Mario Moreno Cantinflas junto al jefe policiaco El Negro Durazo, a Chavela Vargas, a Rockdrigo Gonzalez, María Félix, Dolores Olmedo y Carlos Monsiváis, al actor Roberto Cobos, José Luis Cuevas, Rufino Tamayo, Ernesto de la Peña, a Walter Reuter con Graciela Iturbide.
Además de escritores como Gabriel García Márquez, Jaime Sabines, Jorge Luis Borges, Elena Poniatowska, Carlos Montemayor, Carlos Monsiváis, Octavio Paz, Francisco Ignacio Tabo y José Saramago.
Así como a colegas fotógrafos trascendentes como el cubano Alberto Korda, Ignacio López, Gabriel Figueroa, Raúl Corrales y Manuel Álvarez Bravo.
Con esta conferencia, se clausuro el Diplomado en Periodismo Cultural, organizado por el Instituto Zacatecano de Cultura (IZC).
