El Ceibo, Tab. La caravana de madres de centroamericanos entró hoy a territorio mexicano por el municipio de Tenosique, Tabasco, en la frontera con Guatemala, donde comenzará la novena versión de este movimiento, que busca a familiares extraviados en su cruce sobre suelo nacional en camino hacia Estados Unidos.
El grupo de medio centenar de madres de Nicaragua, El Salvador, Honduras y Guatemala salió ayer domingo en caravana de este último país, rumbo a 14 estados de México en busca de los hijos que desaparecieron en su trayecto migratorio a Estados Unidos, informó Elizabeth Enríquez, una de la organizadoras del evento humanitario.
De acuerdo con estimaciones oficiales mexicanas, unos 140 mil extranjeros -la mayoría centroamericanos- ingresan cada año sin documentos a México, intentando llegar a territorio estadunidense en busca de una mejor vida.
Algunos de ellos pagan a polleros (traficantes) para que los guíen en su ruta clandestina y muchos son víctimas de robo, extorsión, violación, trata, secuestro y asesinato por parte del crimen organizado, así como de abusos por parte de autoridades.
Según la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México, anualmente unos 20 mil migrantes son secuestrados por grupos criminales.
La Mesa para las Migraciones en Guatemala cifra en «unos 70 mil» los desaparecidos desde 2006: «México es un cementerio de migrantes», asegura esa ONG.
