Miguel Rodríguez Jáquez, secretario académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), informó que en este momento no hay ningún programa de licenciatura de la Máxima Casa de Estudios que no esté debidamente registrado y acreditado por los organismos estatales y federales.
El problema que había en Ingeniería y Agronomía al respecto, dijo, no es que no estuvieran al corriente en su registro oficial, sino que solamente había que notificar algunos cambios curriculares.
Sin embargo, aseguró que todos esos trámites se han realizado en tiempo y forma desde la administración anterior, cuando fue abogado general de la UAZ, y ahí también constató los trámites y registros de los programas académicos.
“No tenemos mayor problema, una vez que los programas están aprobados por las instancias correspondientes que en este caso son el Consejo de Unidad, el Consejo de Area y el Consejo Universitario, tienen toda la legalidad para efecto de la Universidad”, explicó el funcionario.
Lo que procede después, agregó Rodríguez Jaquez, es registrar el programa en la Dirección General de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para que ésta pueda emitir la cédula profesional a los egresados.
Entonces cualquier programa u oferta educativa en la UAZ debe pasar por esos procedimientos de aceptación en los diversos organismos de gobierno y posteriormente se hace el registro.
En caso que un programa sea modificado en su currícula, informó que en esos casos solamente se notifica de ello a la Dirección General de Profesiones y la Universidad expide nuevos certificados.
Por lo tanto, reiteró que todas las licenciaturas e ingenierías de la institución están plenamente reconocidas por la autoridad educativa y no hay ningún riesgo para que se pierda esa validez oficial.
No obstante, Rodríguez Jáquez manifestó que hay otros aspectos académicos en los cuales hay cierto rezago, como es el caso de la movilidad estudiantil a otras instituciones del país o del extranjero, pero se está trabajando en diversas áreas y programas para flexibilizar su contenido por créditos y competencias, además de integrar transversalmente temas de género, medio ambiente y derechos humanos, con lo cual se modernizarían los programas.
