México, DF. El director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, invitó a la delegación de empresarios que viajan con el presidente de Israel, Shimon Peres, a invertir en México en el sector energético cuando sea aprobada la reforma presidencial en la materia.
«Los invito a que sigan muy de cerca las discusiones en el Congreso y que se animen a invertir en nuestro país. Se requiere mucho capital y un compromiso con el país. Son inversiones de largo plazo y, sin duda, el espíritu y la relación que se tiene con Israel refleja esto: una relación de largo plazo y de países hermanos», expuso el funcionario al participar en el Foro Estratégico de Negocios México – Israel.
Para explicar a los inversionistas cuál es la situación actual de México en la producción de petróleo, gas y electricidad, así como lo insuficiente que resulta para abastecer el consumo interno, lo que se traduce en un aumento de importaciones, Lozoya Austin les mostró la misma presentación en power point que desde hace meses ha expuesto en diversos foros empresariales e incluso ante legisladores federales.
El funcionario aseveró que México «se inserta en un mercado norteamericano de energía». Al hablar del gas, refirió que «hay una enorme disponibilidad del energético en Norteamérica e incluso y esto también se podría reflejar en nuestro país», e incluso dijo que sucederá a partir de 2014.
«A partir de tener gas barato, esta política cambia no sólo para tener un Pemex muy fuerte a partir de petróleo crudo sino también de masificar la disponibilidad de gas en la economía mexicana y, por lo tanto, que la industria mexicana y los hogares cuenten con el insumo más barato en el mundo. Eso es exactamente lo que está sucediendo en Estados Unidos y eso es lo que empezará a suceder en México a partir del próximo año», expuso.
La iniciativa presidencial, les dijo a los empresarios, pretende abrir el artículo 27 de la constitución e implica que la iniciativa privada podría invertir en exploración y producción bajo la soberanía del Estado, sin ser dueña del subsuelo pero tomando riesgo como sucede en casi la mayoría de los países que tienen petróleo.
Las aclaró que en refinación, petroquímica, ductos, almacenamiento se permitiría un cien por ciento de capital privado, lo cual «es importantísimo porque se ha rezagado la inversión» y en electricidad se pretende que cualquier privado pueda generarla, sea con gas o energías renovables.
