La función primordial del presupuesto es servir de instrumento de la política económica, permite considerar en conjunto los programas sectoriales y sus repercusiones financieras, y se estructura dependiendo de los fines y metas deseadas.
Por ello, un presupuesto debe ir acompañado de criterios de política económica, para saber qué razones determinaron distribuir el gasto de cierta manera y no de otra. Es decir, no se trata sólo de aumento o disminución de cifras totales, si se consiguieron más de los 23 mil millones o menos; lo más importante es que el presupuesto transparente una estrategia. Lo vital es que no sea un mero acomodo inercial de recursos para sobrevivir otro año, sino que sea un instrumento para financiar un plan claro y legítimo.
Las preguntas son: ¿el presupuesto de Zacatecas contiene una estrategia explícita y justificada? Porque se presentan proyectos sueltos de deporte, infraestructura, campo y agua, que no se articulan como medios para fines ulteriores. ¿Esos proyectos son de programas para redistribuir la riqueza y lograr mayor equidad social en el estado? ¿Se tienen proyectadas las consecuencias distributivas de esa estructura del gasto? ¿Producen renta que se va a acumular para lograr un efecto de ahorro y acumulación de inversión? ¿a quién beneficia la intervención pública del Estado? Además, ¿qué porcentaje del presupuesto va directo a gasto de operación ya etiquetado y cuánto a inversión que modifique la realidad social del estado? ¿Es significativo ese porcentaje?
En la reactivación económica, ¿se sustituye o desplaza a la iniciativa privada o se hace sinergia con ella? Porque una inversión no es el final del camino, falta saber qué efectos tendrá esta inversión del sector público en el conjunto de la dinámica económica: ¿el presupuesto tiene la intención de activar la economía por vía de la demanda agregada, o simplemente es una medida incremental sin intenciones metódicas? En suma, ¿qué tipo de presupuesto tendremos en Zacatecas en 2014: estructura de gasto inteligente o una distribución circunstancial?
A los ciudadanos nos preocupa que se hagan gastos sin impactos reales en el desarrollo humano del estado, por ejemplo, el enorme gasto en la infraestructura en seguridad, bajo una estrategia que ha dado pocos resultados. O ver cómo el estado compensará la caída en las bolsas para cultura, tomando en cuenta que somos un estado que une cultura y turismo y ahí va una parte importante de la distribución económica de Zacatecas. Está la perenne deuda histórica con el campo zacatecano de un apoyo estatal que aumente la productividad con equidad. Y en la educación es donde más déficit se acumula.
Así, en suma, esperamos que se presente el paquete económico, y se inicie a una verdadera etapa de debate y reconstrucción del mismo para que tanto sectores sociales y la academia puedan opinar con la certeza de que serán tomados en cuenta para mejorar la propuesta presupuestal; y no sólo se caiga en el tradicional incrementalismo: pequeñas variaciones de la misma estructura. Esperamos.
