Enrique Peña Nieto presentó el domingo el Paquete Económico para 2014 y la Reforma Hacendaria. Ambas propuestas se quedan cortas y tienen tintes políticos para ganar “adeptos” o “simpatías” del pueblo. Ninguna resuelve de fondo la problemática que enfrenta México.
La Reforma Hacendaria y de Seguridad Social que presentó ante la Cámara de Diputados está integrada por 11 iniciativas para expedir, derogar y reformar algunos ordenamientos legales.
De última hora fue eliminada la iniciativa que pretendía imponer el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a medicinas y alimentos. Desde que comenzó el rumor de que podrían gravarse ambos artículos de primerísima necesidad, el PRD patentizamos nuestro total rechazo a la medida y nos congratulamos de que no se diera.
Estoy seguro que este cambio repentino se debió, por una parte, a la presión de los perredistas en el Pacto por México, y por la otra, nada más ni nada menos a una decisión política, a fin de evitar el alto costo que a EPN y al PRI le implicaría en el corto plazo tomar semejante acción, que perjudicaría especialmente a millones de mexicanos que viven en pobreza.
Claro está que al no aplicar el IVA en alimentos y medicinas significa que tampoco captará una importante cantidad de recursos, por más de 500 mil millones de pesos, que ahora tendrá que obtener a través de endeudamiento para el Gasto Público Total.
El Gobierno federal espera un déficit de 3.5 por ciento para 2014, el cual deberá disminuir en los próximos años y llegar al 2 por ciento que se había programa para este año. El meollo del asunto es ¿cómo lo hará?
La Reforma Hacendaria sugiere cambios y modificaciones, como ya dijimos, a diversas leyes, entre ellas reformar Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH) y las leyes del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
También propone modificar la ley al Impuesto Sobre Producción y Servicios (IEPS), y el Código Fiscal de la Federación (CFF) e iniciativa para reformar la Ley Aduanera.
Aunque son bienvenidas las propuestas para derogar los impuestos Empresarial a Tasa Única (IETU) y a los Depósitos en Efectivo (IDE), creo que altamente perjudicial para la clase media que se generalice el IVA en colegiaturas, pago de renta, compras, venta de inmuebles y pago de hipotecas.
En cuanto a la seguridad social tampoco la propuesta “peñista” resuelve la difícil situación que millones de personas viven al entregar un apoyo de poco más de mil pesos o un seguro de desempleo equivalente a un salario mínimo. Ninguna de las dos acciones da bienestar a quienes están en problemas económicos y mucho menos es un sistema de bienestar social universal.
Está ya más que trillado que nos digan, la misma cantaleta de siempre, que debemos apretarnos el cinturón. Que no se les olvide que siempre lo hemos hecho y que ya queremos poner un alto a tanta necesidad y pobreza.
Incrementar la base de recaudación fiscal y hacer que paguen más los que más tienen es una alternativa viable que en el Sol Azteca no sólo apoyamos, sino que promovemos.
Aunque la Reforma Hacendaria contiene varias propuestas que el PRD siempre hemos promovido, en general es insuficiente y se requiere perfeccionarla.
*Representante del PRD ante el IFE
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