El tiempo no se detiene, ya se informa a México del primer año de gestión de Peña Nieto, informe elaborado o revisado por sus riquillos patrocinadores del Pacto por México, el que desde diciembre hasta hoy, orienta o modula las funciones del gobierno de la República. Nada cruento sucedió para adueñarse del poder y ejercerlo, no a trasmano, sino directamente, desde esa instancia para – constitucional y para – estatal, denominada Pacto por México, en la que los chuchos, sin ser tomados en cuenta, dan la cobertura de pluralidad y disfrutan posiciones y satisfacciones de poder, no logradas antes y conseguidas hoy, a costa de lo que sea, según vulgar pragmatismo de aquellos tiempos: no pido que me des, no más ponme donde hay. Ahí están y allí hay, basta ver la chucha sonrisa de satisfacción del señor Zambrano. ¿De qué ríe? ¿De la friega neoliberal que asestan a México los riquillos del Pacto por México, documento faccioso, vigente hasta por encima de la legislación? ¿Golpe de estado neoliberal, hasta hoy, casi incruento? Curioso, con Peña al frente, constitucionalmente avalado; en los hechos, todo el aparato estatal mexicano se somete a ese grupito de riquillos, ¿incluso, las fuerzas armadas? Que nada pueden decir a los medios por su función y compromiso cívico de obediencia al poder federal legalmente constituido.
Nuestra democracia resultó manipulada con éxito por Televisa, aliado principal de Peña desde su gobierno en el Estado de México, con él hacía negocio e invertía en poder. Hoy, junto con sus adinerados pares, gobiernan a México con el Pacto que los une. ¿Peña informará de todo eso? Los del Pacto: ¡Malas noticias, mexicanos ¡Aguanten, no se rindan, todo estará peor¡ ¡Les hablamos con la verdad! ¡Gracias, por su apoyo¡ En off: ¡Je, je, je!
¿Habrá sinceridad en su informe? ¿Por qué eligió primero al Campo Marte, emblema de las fuerzas armadas? Su significado de máxima fortaleza militar republicana, no embona con la fachada de los ricachos del Pacto por México, sus patas neoliberales, ¿pisotean artículos de la Constitución? Los poderosos embisten para fortalecer su proyecto expoliador de todo: mano de obra, recursos naturales e institucionales. ¿Quieren repetir la acumulación originaria de capital en pleno neoliberalismo? Véase su interés en vender Pemex, o una partecita, para colgarse y mamar renta petrolera, si consiguen imponer la contra reforma energética para sembrar en el país, cadenas de estaciones de servicio mediante asociación con petroleras inglesas o gringas, contingencia con posibilidad de realizarse por estar, no bajo el manto protector del huésped de los Pinos, sino porque ellos son sus financieros y él SU presidente.
Lo último trazado por ellos, no lo final, es la retícula del poder para contener y retener a los maestros al moderno estilo de Pavlov: estímulo – acto esperado – recompensa; a acto no esperado, garrotazo, dado en un entorno de escasez de empleo, ausencia de organización sindical efectiva e impartición de justicia improbable, aunque los asista la verdad y la ley. México será una utopía neoliberal por su primigenia forma de amarrar a las masas con lábil educación, sin alimento y sin empleo, mediante el temor y el miedo. El analgésico o amnésico son las recompensas: despensas con lista en mano y contra credencial de elector, para reproducir el modelo mediante esa modernísima forma de construir el poder. Los déficits de atención graves serán atendidos por la prestancia de la señora robles y su sonrisa, ¿de qué ríe? ¿Del éxito para gestionar el hambre y la miseria para reproducir el proyecto neoliberal sin alebrestamiento?
En este escenario, ¿a la UAZ, cómo le va y qué le espera; a ella, a los universitarios y a sus dueños, el pueblo de Zacatecas que la creó y la sostiene? Lo mismo, he aquí el apartado correspondiente en la Ley de Educación:
- Las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la ley otorgue autonomía, tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas; realizarán sus fines de educar, investigar y difundir la cultura de acuerdo con los principios de este artículo, respetando la libertad de cátedra e investigación y de libre examen y discusión de las ideas; determinarán sus planes y programas; fijarán los términos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico; y administrarán su patrimonio. Las relaciones laborales, tanto del personal académico como del administrativo, se normarán por el apartado A del artículo 123 de esta Constitución, en los términos y con las modalidades que establezca la Ley Federal del Trabajo conforme a las características propias de un trabajo especial, de manera que concuerden con la autonomía, la libertad de cátedra e investigación y los fines de las instituciones a que esta fracción se refiere;
Con imaginación, crítica, propuestas, entusiasmo, trabajo y solidaridad, los universitarios de la UAZ enfrentan el reto neoliberal.
