Lisboa La crisis política en Portugal se profundizó el jueves después de que el presidente rechazara un plan para arreglar una crisis de gobierno y sus críticos lo acusaron de activar una «bomba de tiempo» al convocar elecciones anticipadas para el año próximo.
El presidente Aníbal Cavaco Silva propuso un acuerdo interpartidario entre la coalición gobernante y la oposición socialista para garantizar un amplio apoyo a las medidas de austeridad necesarias para que Portugal salga de su rescate el año que viene y después celebre elecciones.
La decisión fue una llamada de advertencia para los principales partidos e indica que el presidente no cree que ninguno de ellos sea capaz de gobernar efectivamente hasta que termine el rescate en junio de 2014.