Aunque no lo establece explícitamente, la modificación al artículo 3 constitucional, que emprendió Gobierno federal, señala entrelíneas que la educación dará cabida a diversos “sectores sociales”, entre ellos a la Iglesia y la iniciativa privada, pero no al magisterio o a los padres de familia que son los principales involucrados en los procesos educativos, afirmó Marcelo Hernández Santos, integrante del Movimiento Democrático del Magisterio Zacatecano (MDMZ).
Además, dijo que la Reforma Educativa únicamente establece estándares y la articulación de los tres niveles de educación básica, pero no resuelve ningún problema ni transforma la estructura de los contenidos de aprendizaje y los logros académicos de los alumnos.
Recordó que los resultados de la Evaluación Nacional del Logro Educativo en Centros Escolares (Enlace), desde su aplicación, muestra variaciones año tras año, pero la tendencia siempre ha sido hacia la reprobación en las competencias básicas respecto a Español y Matemáticas.
“Esto significa que su reforma no va a funcionar y eso muestra que no les interesa que el sistema educativo funcione mejor. Les interesa invertir menos en la educación y van a fundamentarlo o disfrazarlo de varias maneras, pero en el fondo esas son las reformas que plantean”, expresó.
Hernández Santos expuso que en la mayor parte de los municipios, incluidos Zacatecas y Guadalupe que son los de mayor crecimiento urbano, gran parte de los jóvenes entre 15 y 21 años dejaron la escuela y muchos de ellos no dominan la escritura ni la lectura.
Esa generación, dijo, es la que ha sido sujeto de las reformas educativas que se han implementado en México, mediante las cuales se ha tenido como resultado a un capital humano cada vez menos capacitado y más ignorante, pero a la vez a un profesorado más hostigado y presionado.
Indicó entonces que la Reforma Educativa se fundamente en la modificación del artículo 3 constitucional en las Fracciones 7 y 8, y el artículo 73 en la fracción 25, lo que se suma a una inmensa cantidad de modificaciones que ha sufrido la Carta Magna del país, que ya alcanzan 80 por ciento de su contenido.
Con esas nuevas reformas, “están pensando en la idoneidad de los maestros, es decir, significa exclusión para que en base a la reducción del número de plazas, se carezca de profesores en las zonas marginales”.
Por tanto, Hernández Santos reiteró que el discurso oficial que habla de mejorar la calidad educativa no resuelve los problemas de la educación y solamente pretende justificar una política de austeridad que permita involucrar a la iniciativa privada.
