En la conmemoración de fechas cívicas de nuestro país y sin restar méritos a las de algún estado, es importante destacar personajes cuya participación determinó el presente que ahora vivimos. Hace doce días se conmemoraron 99 años de La Toma de Zacatecas. Al respecto, considero que tres personajes se deben mencionar por el legado que dejaron para la entidad. Del Gran Diccionario Enciclopédico de México Visual. Programa Educativo Visual de Humberto Musacchio, destacan los siguientes datos:
1.- Felipe Angeles.- Nació en Zacualtipán Hidalgo, en 1869 y murió en Chihuahua, Chihuahua en 1919. Hijo de un coronel que combatió contra estadunidenses y franceses en 1847 y 1862. Estudió en el Colegio Militar y en Estados Unidos y en Europa se capacitó en artillería. Director del mismo Colegio durante la presidencia de Madero, quien le dio el grado de general brigadier. Combatió la rebelión orozquista y después fue enviado a reprimir al zapatismo. Detenido y desterrado durante la asonada de Victoriano Huerta. Regresó a México clandestinamente y Carranza lo designó subsecretario de Guerra. Las dificultades con Carraza y sus generales lo llevaron a incorporarse a la División del Norte, donde se convirtió en un hombre clave de las fuerzas villistas, pues además de sus reconocidas aptitudes militares, demostró talento político. Fue gobernador militar de Coahuila (1914) y de Nuevo León del 15 de enero al 15 de febrero de 1915. Escribió en tono autocrítico sobre el zapatismo, al que había combatido durante la presidencia de Madero y logró convencer al caudillo suriano de enviar representantes a la Convención de Aguascalientes, de la que fue uno de los principales promotores. Después de la ocupación de la capital y de las batallas de Celaya y León que resultaron adversas para los convencionistas, las fuerzas de Villa se retiraron hacia el norte. Se había producido ya el reconocimiento de Carranza por Washington y Felipe Angeles se exilió.
2.- Francisco Villa.- Nació en Río Grande, Durango, en 1878 y murió en Hidalgo del Parral, Chihuahua en 1923. En 1912 retomó las armas para combatir la rebelión orozquista en la que se negó a participar. Madero envió a Victoriano Huerta como comandante de la División del Norte y Villa se puso a sus órdenes en Torreón. Destacó en los combates de Tlahualilo, Conejos y Rellano y fue ascendido a general brigadier por Huerta, quien luego lo acusó de insubordinación y ordenó su fusilamiento, lo que se evitó por la intervención de Madero. La pena fue conmutada por la de reclusión y se le trasladó a la prisión militar de Santiago Tlatelolco, donde conoció al zapatista Gildardo Magaña, quien le enseñó a leer. Escapó de la cárcel en 1912 y se refugió en Estados Unidos. En marzo de 1913, tras los asesinatos de Madero, José María Pino Suárez y Abraham González, reingresó en México por Chihuahua, con apenas nueve seguidores. Recibió ayuda del gobernador sonorense José María Maytorena y formó un numeroso ejército, que puso a las órdenes de Venustiano Carranza. En septiembre de 1913, quedó constituida en Ciudad Jiménez la División del Norte, con la que creció su prestigio y fue llamado El Centauro de Norte.
Tomó Torreón en septiembre, Chihuahua en noviembre. Ciudad Juárez, Tierra Blanca, cuando aniquiló una división federal y nuevamente Chihuahua.
Su autosuficiencia resultó incompatible con la jefatura unificada que pretendía Carranza. Se agudizó durante la Convención de Aguascalientes. Ambos fueron destituidos de su cargo por esa asamblea pero Carranza se negó a acatar el acuerdo y entró en rebeldía y se inició la lucha de fracciones. Eulalio Gutiérrez elegido presidente por la Convención, designó a Villa jefe de operaciones militares. Con la firma del Pacto de Xochimilco, el 4 de diciembre de 1914, se estableció una alianza entre la División del Norte y el Ejército Libertador del Sur, dirigido por Emiliano Zapata quien logró que el caudillo norteño, se adhiriese al Plan de Ayala.
A fines de 1922, expresó al periodista Regino Hernández Llergo, sus simpatías por el precandidato a la presidencia Adolfo de la Huerta, quien estaba en competencia por el cargo con Plutarco Elías Calles.
3.- Emiliano Zapata.- Nació en San Miguel Anenecuilco en 1879 y murió en Chinameca, Morelos en 1919. Participó en Cuautla en una junta, en la que se planteó la necesidad de defender la tierra de los campesinos morelenses de la voracidad de los hacendados porfiristas. Como represalia en 1908 se le forzó a incorporarse al noveno Regimiento de Cuernavaca. Ingresó como soldado raso, pero pronto fue ascendido a caballerango de Pablo Escandón, jefe del estado mayor de Porfirio Díaz y más tarde, ocupó el mismo cargo a las órdenes de Ignacio de la Torre en la Ciudad de México. Este último autorizó su baja. El 12 de septiembre de 1908, se le eligió presidente de la Junta de Defensa de las tierras de Anenecuilco. En ese año apoyó la candidatura de Patricio Leyva para la gubernatura del estado, en oposición a Pablo Escandón. Cuando este fue declarado triunfador, Anenecuilco sufrió un despojo de tierras, las que en mayo de 1910, recuperó Zapata para toda la comunidad. ■
