■ Afirma que sólo Grupo Frisco solicitó apoyo para mantener vigilancia de la Policía Estatal
■ Se tiene un problema difícil; están involucrados tres grupos gremiales diferentes, asevera
El secretario general de Gobierno, Francisco Escobedo Villegas, negó que los trabajadores en paro en la unidad minera El Coronel solicitaran la intervención de la administración estatal para solucionar el conflicto con Grupo Frisco, sin embargo las autoridades están imposibilitadas para mediar debido a que se trata de un conflicto sindical.
Gobierno del Estado se encuentra atento a este tipo de situaciones a fin de promover una solución de los problemas, sin embargo mencionó que a pesar de la intervención de un funcionario federal con la visita del subsecretario del Trabajo, Rafael Avante Juárez, se trata de un conflicto que no es de fácil solución.
“Tenemos que decirlo con todas sus letras, es un conflicto minero, conflicto interno de intereses sindicales que escapa hasta este momento de nuestras posibilidades. Pareciera que la disputa de los intereses sindicales es por mantener el control y el contrato con la empresa, por lo que escapa a las posibilidades de Gobierno del Estado, de la Secretaría General”, expuso.
La única solicitud de apoyo que esta instancia estatal recibió en los últimos días es por parte de la empresa, al requerir la intervención de Gobierno estatal a fin de lograr que los paristas permitan el relevo de las guardias que se encuentran al interior de la mina y vigilan el manejo de productos químicos que representan un peligro para la comunidad y el entorno.
En este sentido mencionó que el pasado martes las autoridades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como de Protección Civil del Estado se presentaron ante los paristas para advertir sobre los riesgos y la grave responsabilidad en que incurrirían al impedir el cambio de guardia, sin embargo no hubo sensibilidad al respecto.
Los representantes de Grupo Frisco también solicitaron a Gobierno del Estado que continúe el apoyo en el tema de seguridad, por lo que patrullas de la Policía Estatal Preventiva (PEP) seguirán el resguardo en las instalaciones de la minera y vigilarán la integridad de quienes participan en el paro, a fin de evitar algún enfrentamiento, detalló Escobedo Villegas.
La empresa solicitó además resguardo policiaco para 13 camiones de transporte de personal en los que, de acuerdo con información del secretario general de Gobierno, se traslada a trabajadores de la unidad minera para recibir capacitación en Aguascalientes, sin embargo el requerimiento no puede ser atendido, agregó el funcionario, ya que se desatenderían otras necesidades del estado.
Reiteró que el gobierno está en la mejor disposición para intervenir si con ello se resuelve el problema, sin embargo afirmó que es necesaria una participación seria, responsable y sensible de todas las partes.
“El primer paso es que se resuelva el problema sindical, de otra manera no habrá condiciones para avanzar. Falta voluntad de los actores sindicales para que se pongan de acuerdo al interior y luego con la empresa, porque entiendo que ésta tiene un problema difícil al tener que tratar con tres sindicatos diferentes, y me parece que eso complica la situación”, sostuvo.
Escobedo Villegas negó que Gobierno estatal se lavara las manos respecto al paro de actividades que más de 600 trabajadores sostienen desde el pasado miércoles 29 de mayo. Afirmó que quienes se acercaron al mandatario para pedir su intervención en el conflicto son hijas de los trabajadores que se encuentran al interior de la mina y que solicitan que sus familiares puedan salir con el cambio de guardia.
Hace una semana se informó que Grupo Frisco notificó a Profepa sobre un derrame de cianuro en la unidad minera El Coronel, que afectó una superficie aproximada de mil metros cuadrados, sin embargo los mineros en paro denunciaron que ésta es la primera vez que la empresa informa sobre este tipo de incidentes, por lo que afirman que se trata de una medida para presionar a los trabajadores.
